"La arquitectura siempre va detrás de la sociedad"

José V. Vallejo (Santander, 1960), arquitecto y profesor de Proyectos de la Universidad de Navarra, codirigió hace unos días en San Sebastián el curso de verano de la UPV Arquitecturas periféricas peninsulares, organizado con la colaboración de la Fundación BBVA. Jóvenes profesionales expusieron en él sus diferentes visiones arquitectónicas. Y lo hicieron desde su posición de "periféricos", tanto por su ubicación geográfica -no están inmersos en la centralidad organizada en torno a Madrid y Barcelona- como por su forma de trabajar. "Es más huidiza de los medios de comunicación y de ense...

José V. Vallejo (Santander, 1960), arquitecto y profesor de Proyectos de la Universidad de Navarra, codirigió hace unos días en San Sebastián el curso de verano de la UPV Arquitecturas periféricas peninsulares, organizado con la colaboración de la Fundación BBVA. Jóvenes profesionales expusieron en él sus diferentes visiones arquitectónicas. Y lo hicieron desde su posición de "periféricos", tanto por su ubicación geográfica -no están inmersos en la centralidad organizada en torno a Madrid y Barcelona- como por su forma de trabajar. "Es más huidiza de los medios de comunicación y de enseñar sus proyectos", explica Vallejo.

Pregunta. ¿Qué diferentes visiones presentan estos arquitectos?

Respuesta. Cada uno hace lo que cree que le interesa. No existe una cohesión entre las propuestas de unos y otros, aunque en todos los que han participado en este curso hay unos planteamientos de racionalidad, entendida como la ausencia de despilfarro y como el aprovechamiento de las energías económicas y materiales.

P. ¿Ese sí es un punto de unión?

R. Sí. Están muy pegados al terreno, son muy conscientes de que la arquitectura no es algo de consumo como para despilfarrar, sino que es algo más necesario.

P. ¿Cómo traduce la arquitectura el trinomio residencia, trabajo y ocio, dada la carestía de las viviendas y que, por tanto, son más bien pequeñas?

R. El desarrollo de las nuevas tecnologías permitirá que cada vez más se pueda practicar el trabajo a distancia, de manera que se pueda vivir en una casa a cierta distancia y no tan vinculada al precio del suelo. Hay elementos de residencia que a lo mejor en estos momentos ni nos planteamos.

P. ¿Por ejemplo?

R. A lo mejor resulta que las bordas abandonadas por los pastores pueden volver a recuperarse para vivir. No sé si por familias, porque surge la cuestión de los colegios y de miles de cosas, pero sí una parte de la sociedad.

P. ¿Propone recuperar espacios no urbanos?

R. En Estados Unidos ya ocurre, pero en Europa es más difícil, porque somos una sociedad más urbana y no estamos acostumbrados a vivir rodeados de nada.

P. ¿Qué posibilidades abre este planteamiento a la arquitectura?

R. La arquitectura no es tan protagonista, nunca ha sido la panacea. En general, siempre va detrás de las demandas e inquietudes de la sociedad. Responde a unas exigencias previas de la sociedad, aunque siempre hay, como en todo, las avanzadillas, cuya existencia es fundamental.

P. ¿Es imprescindible la relación entre arquitectura y paisaje?

R. Es imprescindible contar con el entorno, sea bueno o malo; para defenderse de él o para aprovecharse de él.