Ascer teme que México extienda las cuotas 'antidumping' a todo el sector
El séptimo mercado del azulejo sigue pendiente de un expediente
El expediente abierto en su día por las autoridades mexicanas contra seis empresas azulejeras españolas acusadas de vender sus productos por debajo del precio de coste para reventar la competencia local se ha convertido en una amenaza para el sector. Fuentes de la patronal cerámica temen que México, el séptimo mercado exterior del azulejo, resuelva imponer derechos antidumping a todos los fabricantes españoles.
Fernado Diago, presidente de la patronal cerámica (Ascer), analizó la situación del expediente el lunes con Juan Costa, secretario de Estado de Comercio, y le trasladó la ...
El expediente abierto en su día por las autoridades mexicanas contra seis empresas azulejeras españolas acusadas de vender sus productos por debajo del precio de coste para reventar la competencia local se ha convertido en una amenaza para el sector. Fuentes de la patronal cerámica temen que México, el séptimo mercado exterior del azulejo, resuelva imponer derechos antidumping a todos los fabricantes españoles.
Fernado Diago, presidente de la patronal cerámica (Ascer), analizó la situación del expediente el lunes con Juan Costa, secretario de Estado de Comercio, y le trasladó la preocupación del sector porque las autoridades mexicanas fijen, finalmente, derechos antidumping a los azulejeros, "basándose en tecnicismos legales o incluso en una aplicación forzada de la ley mexicana", según indicaron ayer fuentes de la patronal cerámica.
El organismo mexicano competente en el caso ya ha verificado todos los datos aportados por las empresas. En marzo adoptó una primera resolución que supuso la imposición de cuotas antidumping a la mitad de las 37 empresas investigadas.
Ascer teme que el expediente siga vivo y las cuotas se extiendan a todos los fabricantes que pretendan vender en México a través de un procedimiento obligatorio de "nuevo exportador".
Un portavoz de Ascer apunta que la incertidumbre que resultaría de una resolución contraria a los intereses del sector cerámico español "y la mala imagen que generaría, serían muy dañinas y producirían la práctica pérdida del mercado de México".
El posible recurso de España ante la Organización Mundial de Comercio (OMC) tardaría dos o más años en resolverse, y el daño sería prácticamente "irreversible", según la misma fuente.
El secretario de Estado de Comercio garantizó toda su colaboración con el sector.