Un centenar de colectivos reclamará el sábado en Valencia un urbanismo más participativo
Plataformas contra el abuso y la barbarie urbanística confían en reunir a miles de personas
Los organizadores de la manifestación convocada para el sábado en Valencia en demanda de un urbanismo más participativo y en contra de los abusos que se denuncian desde hace tiempo confían en reunir a miles de personas. Más de un centenar de colectivos sociales, organizaciones ecologistas, sindicatos y partidos políticos convocan esta protesta, que pretende forzar una revisión de las políticas urbanísticas autonómica y municipales para evitar los abusos, mediante un modelo en el que se tenga en cuenta la participación de los ciudadanos en los proyectos que les afectan.
La iniciativa de ...
Los organizadores de la manifestación convocada para el sábado en Valencia en demanda de un urbanismo más participativo y en contra de los abusos que se denuncian desde hace tiempo confían en reunir a miles de personas. Más de un centenar de colectivos sociales, organizaciones ecologistas, sindicatos y partidos políticos convocan esta protesta, que pretende forzar una revisión de las políticas urbanísticas autonómica y municipales para evitar los abusos, mediante un modelo en el que se tenga en cuenta la participación de los ciudadanos en los proyectos que les afectan.
La iniciativa de convocar una manifestación nació en octubre pasado en Valencia. Integrantes de colectivos como Iniciativa Per l'Horta, Salvem El Cabanyal y Salvem el Botànic, que levan tiempo luchand contra proyectos urbanísticos que consideran lesivos para los ciudadanos, pensaron en ponerse en marcha para que, de cara a las elecciones municipales y autonómicas de mayo próximo, sus revindicaciones estuvieran presentes en el debate. El objetivo final es hacer realidad el lema Democracia participativa ya, no sin nosotros, que presidirá la manifestación del sábado.
"Buscamos un renacimiento de la participación ciudadana", señaló ayer Faustino Villora, portavoz de Salvem El Cabanyal, en el acto de presentación de la iniciativa celebrado ayer tarde en Valencia, en el que participaron tambiénJuan Barceló, en representación de las plataformas contra la Barbarie Urbanística de Castellón y Valencia, y Pedro del Baño, en representación de los grupos ecologistas.
El abogado Antonio Montiel, miembro de Per L'Horta, considera que la Iniciativa Legislativa Popular para proteger la huerta valenciana, que a pesar de contar con el apoyo de 117.700 firmas fue rechazada en las Cortes, supuso un salto cualitativo de los movimientos ciudadanos, al pasar de la "resistencia a actitudes propositivas" que reflejan la exigencia de contar con cauces participativos. Esa "vocación por participar" de los ciudadanos que desemboca en la manifestación del sábado comenzó a nuclearse en torno a Salvem El Cabanyal, Salvem el Botànic y Per L'Horta, a las que se han ido sumando otros colectivos. Entre ellos, los grupos Abusos Urbanísticos No, que últimamente han adquirido protagonismo y en los que se integran numerosos residentes extranjeros afectados por la aplicación de la Ley Reguladora de la Actividad Urbanística (LRAU). La redacción de una carta ciudadana por una democracia participativa ha sido uno de los resultados de esta confluencia de intereses y los organizadores esperan que los partidos políticos "tomen nota" y dejen de marginarles.
Carlos Arribas, de Ecologistas en Acción, pone el acento de la movilización en la necesidad de la "participación de los ciudadanos en la fase de diseño de los planes urbanísticos". Ante los proyectos de desarrollo territorial y urbanístico, los ciudadanos "chocan contra un bloque de cemento" y contemplan cómo los procesos de exposición pública y alegaciones se convierten en puro trámite, mientras aumenta la presión urbanística sobre los espacios naturales.
Francisco Sanz, portavoz de Tren sí, AVE no, afirma que es hora de decir "basta" a la Administración por aprobar planes que transforman el entorno de los ciudadanos sin contar con ellos en la toma de decisiones.