La izquierda se une para ejercer más control sobre las encuestas

Los tres grupos de izquierda no quieren que el escándalo por la manipulación de las encuestas se pierda en el limbo parlamentario. Y ni mucho menos que pueda repetirse. Ayer mismo, socialistas, Iniciativa per Catalunya y Esquerra Republicana presentaron una proposición no de ley con la que se busca cambiar la legislación para aumentar el control de la Cámara sobre los sondeos públicos. Esta iniciativa se suma a la del PP para que el conseller en cap, Artur Mas, aclare en el Parlament este asunto.

La de ayer es la enésima iniciativa de la oposición tras conocerse que el Gob...

Los tres grupos de izquierda no quieren que el escándalo por la manipulación de las encuestas se pierda en el limbo parlamentario. Y ni mucho menos que pueda repetirse. Ayer mismo, socialistas, Iniciativa per Catalunya y Esquerra Republicana presentaron una proposición no de ley con la que se busca cambiar la legislación para aumentar el control de la Cámara sobre los sondeos públicos. Esta iniciativa se suma a la del PP para que el conseller en cap, Artur Mas, aclare en el Parlament este asunto.

La de ayer es la enésima iniciativa de la oposición tras conocerse que el Gobierno catalán alteró u ocultó datos en tres encuestas oficiales: dos barómetros semestrales de Presidencia y una encuesta referida a la política eléctrica de Indústria que censuraba su actuación en el conflicto de la línea Les Gavarres.

El Partit dels Socialistes (PSC), Esquerra Republicana (ERC) e Iniciativa per Catalunya Verds (ICV) se unieron ayer para presentar conjuntamente una proposición no de ley que, de prosperar, dificultaría nuevas manipulaciones. En la exposición de motivos los partidos sostienen que "la continua aparición de informaciones que apuntan a una ocultación y manipulación de los datos que se entregan al Parlament" aconseja emprender una "regulación más precisa".

La proposición, promovida por Joaquim Nadal, quiere forzar al Gobierno catalán a entregar todas las fichas técnicas de las encuestas, así como "las frecuencias de todas las variables incluidas", además de la base de datos del sondeo, en soporte informático. Estas medidas se inspiran en el funcionamiento del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), donde cualquier ciudadano puede comprar toda la base de datos de una encuesta encargada por el Gobierno a partir de 40 euros.

Asimismo, la proposición inquiere al Ejecutivo para que, en caso de realizarse encuestas en periodo electoral sobre intención de voto o valoración de líderes políticos, se comunique a los partidos políticos que concurran a los comicios "como máximo a las 48 horas siguientes a la finalización" del trabajo de campo.

La oposición y el PP ya han presentado otras iniciativas parlamentarias para que el Gobierno de CiU dé explicaciones por las "manipulaciones" de estas encuestas oficiales. El PP, además, pide que sea el conseller en cap, Artur Mas, quien "dé la cara" ante el Parlament y llevará la polémica al pleno de la próxima semana. Iniciativa incluso ha presentado otra proposición no de ley para que la Cámara catalana inste al Ejecutivo a pedir el cese de David Madí, secretario de Comunicación del Gobierno y uno de los principales colaboradores de Artur Mas.

El conseller en cap se comprometió a dar explicaciones al Parlament, aunque minimizó la polémica, al igual que sus correligionarios de CiU. A su juicio, "se organiza mucho escándalo por errores muy pequeños".