El funcionario detenido en Lleida regularizó a trabajadoras de clubes de alterne
El subdelegado del Gobierno central en Lleida, Joan Barios, admitió ayer que algunos de los expedientes tramitados de forma irregular por el funcionario de la Oficina de Extranjería detenido el martes por supuesta falsificación de documentos, podrían corresponder a mujeres inmigrantes que presuntamente se dedican a la prostitución en locales de alterne de la provincia.
El funcionamiento de esta oficina se encontraba bajo sospecha desde hace tres o cuatro años, aunque hasta ahora nadie había denunciado ninguna actuación delictiva. Barios explicó que la presunta falsificación la descubrió...
El subdelegado del Gobierno central en Lleida, Joan Barios, admitió ayer que algunos de los expedientes tramitados de forma irregular por el funcionario de la Oficina de Extranjería detenido el martes por supuesta falsificación de documentos, podrían corresponder a mujeres inmigrantes que presuntamente se dedican a la prostitución en locales de alterne de la provincia.
El funcionamiento de esta oficina se encontraba bajo sospecha desde hace tres o cuatro años, aunque hasta ahora nadie había denunciado ninguna actuación delictiva. Barios explicó que la presunta falsificación la descubrió él personalmente hace dos meses cuando, en el momento de la firma, comprobó que dos expedientes de regularización de inmigrantes que llegaron a su despacho para recibir el visto bueno no habían seguido los trámites burocráticos establecidos. "Observé expedientes mal instruidos y que algunos documentos habían pasado de una fase a otra de forma directa, por lo que ante la duda puse el hecho en conocimiento de la Guardia Civil", señaló el subdelegado.
La Guardia Civil detuvo el martes como presunto responsable de un delito de falsificación y otro de prevaricación a M. R. M., un auxiliar administrativo de 41 años destinado en la Oficina de Extranjería de Lleida. Este funcionario está acusado de falsificar los documentos de una veintena de ciudadanos extranjeros para que pudieran conseguir fácilmente los permisos de trabajo y de residencia.
Al parecer, estas personas habrían podido regularizar su situación en España sin tener ofertas de trabajo ni reunir los requisitos previstos en la Ley de Extranjería. Barios no quiso confirmar si el funcionario expedientado ha recibido sobornos a cambio de facilitarles la documentación, aunque se sospecha que podría colaborar con alguna gestoría o empresa de trabajo temporal.
Barios señaló que los expedientes que ya han sido tramitados de forma irregular por el funcionario detenido son válidos a efectos administrativos.