"El laborismo se desintegrará si pacta con Sharon"
Slomo Ben Ami, 59 años, diputado por el Partido Laborista, ex ministro de Seguridad Interior y de Exteriores en el Gobierno de Ehud Barak, es por su formación académica y política uno de los animadores más importantes del proceso de reforma del laborismo israelí.
Pregunta. ¿Para qué sirven estas elecciones?
Respuesta. Estas elecciones no sirven para gran cosa. Son elecciones sin esperanza, tristes, sin que se apunten soluciones y se den respuestas reales a los problemas del país. Sólo sirven para alimentar la antorcha de la tribu.
P. ¿El laborismo form...
Slomo Ben Ami, 59 años, diputado por el Partido Laborista, ex ministro de Seguridad Interior y de Exteriores en el Gobierno de Ehud Barak, es por su formación académica y política uno de los animadores más importantes del proceso de reforma del laborismo israelí.
Pregunta. ¿Para qué sirven estas elecciones?
Respuesta. Estas elecciones no sirven para gran cosa. Son elecciones sin esperanza, tristes, sin que se apunten soluciones y se den respuestas reales a los problemas del país. Sólo sirven para alimentar la antorcha de la tribu.
P. ¿El laborismo formará de nuevo una coalición con el Likud?
R. Espero que no. Espero que prevalezca la posición de Amram Mitzan, que se niega a participar en un Gobierno de unidad nacional con Ariel Sharon. Espero que sepa vencer a las presiones de dentro del partido que piden participar en el próximo Gobierno de unidad nacional.
P. ¿Y si el laborismo acaba pactando con Sharon?
R. Entonces será la desintegración del laborismo. Aunque en este país cabe cualquier sorpresa.
P. Entonces, ¿para cuándo las próximas elecciones?
R. Para muy pronto. Si los laboristas se niegan a entrar en el Gobierno, Sharon no podrá formar una coalición sensata y entonces tendremos nuevas elecciones.
P. ¿Cuáles son las razones de la crisis laborista y del desastre electoral que anuncian las encuestas?
R. Hay una razón estructural. El laborismo no ha sabido entrar en las nuevas clases israelíes, ha continuado anclada en la alta burguesía askenazi, que procedía de Europa. Cada vez que oía la sirena de una ambulancia decía que había un militante menos en nuestro partido. Pero además hemos perdido la credibilidad durante los dos años en que hemos estado colaborando con Sharon en el Gobierno de unidad nacional. Ahora recibimos el castigo y la penalización por esta colaboración. Otra razón importante es que el laborismo es el reflejo del proceso de paz, el laborismo está identificado con él y este proceso está muerto.
P. Y si el proceso de paz está muerto, ¿cómo acabar el conflicto con los palestinos?
R. El proceso de paz como instrumento ya no sirve. Hay que inventar una nueva fórmula. Ni la izquierda ni la derecha israelí pueden hacer nada para ello. La solución tiene que venir desde fuera, de la comunidad internacional.