El 46% de las 8.867 inmigrantes que fueron madres en 2001 eran solteras

Los niños nacidos de madres solteras (mujeres que viven solas o en parejas de hecho) son casi tres veces más frecuentes entre las inmigrantes que entre las madrileñas. De los 8.867 bebés extranjeros nacidos en la región en 2001, un 46% lo fueron de madres solteras, según datos del Instituto Regional de Estadística. Por el contrario, de las 50.156 madrileñas que dieron a luz ese año, sólo un 17% tuvo a sus hijos sin pasar por juzgados o vicarías. Entre las extranjeras es corriente creer que tener un hijo en España da facilidades para obtener más rápidamente la residencia.

Esta mayor tend...

Los niños nacidos de madres solteras (mujeres que viven solas o en parejas de hecho) son casi tres veces más frecuentes entre las inmigrantes que entre las madrileñas. De los 8.867 bebés extranjeros nacidos en la región en 2001, un 46% lo fueron de madres solteras, según datos del Instituto Regional de Estadística. Por el contrario, de las 50.156 madrileñas que dieron a luz ese año, sólo un 17% tuvo a sus hijos sin pasar por juzgados o vicarías. Entre las extranjeras es corriente creer que tener un hijo en España da facilidades para obtener más rápidamente la residencia.

Esta mayor tendencia de las inmigrantes, sobre todo ecuatorianas, a ser madres sin casarse se debe, según diversas ONG consultadas, a razones culturales, a la soledad y el hacinamiento en el que viven, a la desinformación sobre anticonceptivos y a la idea extendida entre las sin papeles de que tener un hijo en España impide su expulsión.

Felipe Baselga, director del Instituto Regional de Estadística, explica que, con los datos de los que disponen, es imposible saber si estas mujeres que dan a luz sin estar casadas tienen o no pareja. "Quizá con los resultados del censo de población lleguemos a saber algo más, por ejemplo el número de hogares de mujeres que viven solas con sus hijos. Pero también es complicado, porque hay inmigrantes que no contestan al censo", señala.

Poca presencia masculina

"Nosotros somos estadísticos, no sociólogos. Ofrecemos unos datos, y son otros los que deben explicarlos. Pero a mí, personalmente, no me chocan tantos nacimientos fuera del matrimonio entre las inmigrantes, porque, al fin y al cabo, gran parte viene de países latinoamericanos donde hay muchas mujeres que sustentan la familia; la figura masculina tiene poca presencia", añade Baselga.

"Hay que tener en cuenta, además, que la mayoría de los inmigrantes son jóvenes, tienen de 25 a 35 años, por lo que puede ocurrir que, aunque algunos estuviesen ya casados en sus países de origen, formen otra familia aquí, como ocurrió también con emigrantes españoles en el extranjero", concluye el director del Instituto Regional de Estadística.

La mayor tendencia a tener hijos sin casarse de las inmigrantes respecto a las madrileñas no es algo nuevo en los anuarios estadísticos de la Comunidad. En 1995 los nacimientos fuera del matrimonio suponían el 30% entre las extranjeras y el 12% entre las madres autóctonas.

De hecho, a Yolanda Villavicencio, presidenta de la Asociación América España Solidaridad y Cooperación (AESCO), no le chocan estos datos. "En Colombia, y en toda América Latina en general, hay muchas mujeres cabeza de familia, sobre todo en los estratos sociales más bajos de las respectivas sociedades", asegura.

Villavicencio lo detalla así: "Influye la cultura de allí y el machismo. Hay hombres que no están dispuestos a formalizar una relación; y, como la mujer latinoamericana concibe la maternidad como algo básico para su realización personal, al final acaba teniendo el hijo aunque su pareja no quiera casarse".

"Pero aquí, más que madres solas, lo que hay es mujeres con parejas de hecho que deciden tener hijos", apostilla. "Además, entre las inmigrantes sin papeles se ha extendido la idea de que dando a luz en España es difícil que las expulsen, y eso hace que algunas, que ya querían ser madres, adelanten su decisión aunque no estén casadas", concluye la presidenta de AESCO.

Tampoco a Raúl Jiménez, portavoz de la asociación ecuatoriana Rumiñahui, le extraña ese 46% de niños nacidos fuera del matrimonio. "En mi país es frecuente que las parejas tengan hijos sin casarse, aunque luego, pasados algunos años, acaben haciéndolo. Allí, a una mujer de 24 años se la considera ya una solterona, y por eso las que quieren ser madres intentan tener los hijos antes de esa edad, porque creen que después les va a resultar más difícil", asegura.

Soledad y depresión

"A los ecuatorianos afincados en Madrid, además de ese factor cultural, les influyen otras cuestiones, como la soledad y la depresión, el hacinamiento en el que viven muchos de ellos y el escaso conocimiento de los métodos de planificación familiar. En Ecuador, en general, está mal visto que una chica entre a una farmacia a comprar preservativos", matiza Jiménez.

"Además, hay mujeres muy angustiadas por la falta de papeles que deciden tener un hijo aquí porque les han dicho que así van a poder conseguir la residencia más fácilmente. Ellas quieren ser madres, pero sin esa presión por su situación irregular quizá se esperarían un poco más", concluye el portavoz de Rumiñahui.

Rosario Zanabria, presidenta de Ari-Perú, considera, sin embargo, que en la comunidad peruana predomina más la tradición y que, por ello, la mayor parte de los niños nace dentro del matrimonio.

Tampoco Malika Abdelaziz, coordinadora del área de la mujer de la Asociación de Trabajadores Inmigrantes Marroquíes en España (ATIME) cree que existan muchos casos de madres solteras entre las inmigrantes magrebíes.

"Lo que sí puede ocurrir es que algunas mujeres casadas en Marruecos digan que son solteras al dar a luz aquí, porque atraviesan situaciones muy difíciles y piensan que eso les puede favorecer para obtener alguna ayuda social; eso es posible porque los datos de los libros de familia españoles y marroquíes no se cruzan", explica Abdelaziz.

En el Voluntariado de Madres Dominicanas en España (Vomade) aseguran, asimismo, que entre las mujeres de este país afincadas en Madrid es poco habitual tener hijos fuera del matrimonio. Maine Rubio, psicóloga de la asociación, explica que la mayoría de las inmigrantes quisquellanas ya eran madres cuando decidieron cruzar el Atlántico.

"Se vinieron para ganar dinero y sacar a su familia adelante, por lo que no es frecuente que aquí formen una nueva pareja y tengan hijos con ella. Lo habitual es que acaben trayéndose a los niños desde la República Dominicana", matiza Maine Rubio. Esta psicóloga añade que los nacimientos de madres solteras son más frecuentes entre los inmigrantes ecuatorianos, a los que también atiende Vomade.