Protesta contra los cierres de Valeo y Puigneró
El centro de Barcelona fue ayer escenario de dos manifestaciones que llevaron a cabo los trabajadores de la multinacional francesa Valeo y de la textil catalana Hilados y Tejidos Puigneró en protesta por el cierre de dos plantas de ambas compañías que dejarán sin empleo a cerca de 500 personas.
Los manifestantes se concentraron ante el Palau de la Generalitat para reclamar la implicación del Gobierno catalán. La manifestación más numerosa, convocada por los sindicatos CC OO y CGT, congregó a unos 1.200 trabajadores de la empresa Valeo, que ha decidido trasladar a una planta de Martos (J...
El centro de Barcelona fue ayer escenario de dos manifestaciones que llevaron a cabo los trabajadores de la multinacional francesa Valeo y de la textil catalana Hilados y Tejidos Puigneró en protesta por el cierre de dos plantas de ambas compañías que dejarán sin empleo a cerca de 500 personas.
Los manifestantes se concentraron ante el Palau de la Generalitat para reclamar la implicación del Gobierno catalán. La manifestación más numerosa, convocada por los sindicatos CC OO y CGT, congregó a unos 1.200 trabajadores de la empresa Valeo, que ha decidido trasladar a una planta de Martos (Jaén) la producción de la fábrica que tiene en Sant Esteve Sesrovires y despedir a sus 257 empleados.
Los trabajadores afectados por esta reestructuración desfilaron por el centro de Barcelona junto con los empleados de otras tres plantas que esta multinacional tiene en Cataluña. Los representantes sindicales se reunieron con el secretario de Asuntos Laborales y Empleo de la Generalitat, Andreu Cruañas, para pedirle que el Gobierno catalán no apruebe el expediente de regulación de empleo que Valeo presentó en diciembre.
También los trabajadores de la textil Puigneró instaron al Ejecutivo catalán a paliar los efectos que producirá el cierre de la fábrica de Prats de Lluçanès, que supondrá el despido de 220 trabajadores. Cruañas se comprometió a poner en marcha una mesa de reindustrialización para esta zona. Los representantes sindicales y la dirección de Puigneró se reunieron por la tarde para negociar las condiciones del cierre, informa Eva Clota. La última oferta, que los trabajadores discutirán hoy en asamblea, establece indemnizaciones de 30 días por año trabajado con unos incentivos de 1.200 euros, así como el pago de los salarios atrasados.