La ubicación del futuro centro de arte de Girona en Salt desata la polémica

Anna Pagans acusa a la Generalitat de beneficiar a un municipio gobernado por CiU

El futuro centro de arte contemporáneo de las comarcas de Girona se ubicará con toda probabilidad en Salt y podría ocupar unos 2.000 metros cuadrados de los 18.000 que tiene la antigua fábrica textil Coma Cros. Aunque la Generalitat no ha confirmado oficialmente la apuesta por el municipio vecino de Girona, tanto el alcalde de Salt, Jaume Torramadé, como la alcaldesa de la ciudad, Anna Pagans, dan por decidido el emplazamiento. Pagans atribuye sectarismo a la decisión de la Generalitat, a la que acusa de querer beneficiar electoralmente a un municipio en el que gobierna CiU.

"El Departa...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El futuro centro de arte contemporáneo de las comarcas de Girona se ubicará con toda probabilidad en Salt y podría ocupar unos 2.000 metros cuadrados de los 18.000 que tiene la antigua fábrica textil Coma Cros. Aunque la Generalitat no ha confirmado oficialmente la apuesta por el municipio vecino de Girona, tanto el alcalde de Salt, Jaume Torramadé, como la alcaldesa de la ciudad, Anna Pagans, dan por decidido el emplazamiento. Pagans atribuye sectarismo a la decisión de la Generalitat, a la que acusa de querer beneficiar electoralmente a un municipio en el que gobierna CiU.

"El Departamento de Cultura debería haber mostrado una actitud mucho más abierta y mucho menos dogmática y me atrevería a decir que mucho menos sectaria", afirma la alcaldesa. Pagans considera "frívola" la decisión del departamento que dirige Jordi Vilajoana, puesto que, según sostiene, no existe proyecto ni se han definido las funciones del centro. Pagans está convencida de que se ha actuado "por electoralismo" y de espaldas a la ciudad de Girona. Según explica, Vilajoana le confirmó el pasado 18 de diciembre que el centro se ubicaría en la antigua fábrica textil de Salt. La alcaldesa asegura que el consejero le dijo entonces que hacía meses que la Generalitat tenía tomada esta decisión.

Jaume Torramadé afirma no entender las duras declaraciones de Pagans. "Parece que se está poniendo nerviosa", ironiza el alcalde de CiU y asegura que su municipio está trabajando desde hace tiempo en este centro. Torramadé no oculta que el proyecto está aún muy verde y explica que el nuevo centro podría ocupar una superficie de entre 200 y 2.000 metros cuadrados. "No se tratará de un museo, sino de algo radicalmente opuesto; será un espacio vivo donde se fusionarán diversas sinergias", dice el alcalde.

La alcaldesa de Girona no renuncia al centro de arte contemporáneo, una demanda creciente de los sectores culturales de la ciudad. Hace pocos meses, el anuncio de que el Banco de España podría abandonar su sede, un moderno, espectacular y céntrico edificio circular, motivó que algunos ciudadanos reclamaran su uso como centro de arte contemporáneo. No obstante, la dirección del banco hizo saber que no prevé la venta ni la cesión del edificio. Poco antes de que su predecesor, Joaquim Nadal, dejase el cargo, Pagans apuntó la posibilidad de situar un centro de arte contemporáneo en los terrenos que quedarían libres con la marcha de las dependencias que el Ministerio de Defensa todavía conserva en la zona del ensanche. Pagans habló de un centro para impulsar la creación contemporánea, a partir de un edificio emblemático de nueva planta. Este centro debía servir también para albergar obras que ahora se guardan, por falta de espacio, en los almacenes de diversos museos de Girona. Torramadé asegura que acogerán gustosos estas piezas para que puedan ser expuestas en Salt "en lugar de estar guardadas en unos almacenes", aunque afirma que no dependen de este contingente de obras cedidas por Girona, ya que tienen "otras ofertas importantísimas".

El Ayuntamiento de Girona defiende la tradición que existe en Girona en el campo del arte contemporáneo, mientras que la Generalitat siempre ha esgrimido el reequilibrio territorial a la hora de decidir el emplazamientos de los nuevos centros.

La decisión de impulsar museos descentralizados se incluye en el Plan de Promoción de las Artes Visuales, presentado el pasado 11 de octubre. La Generalitat prevé elaborar el plan de centros de arte contemporáneo en colaboración con los ayuntamientos durante el periodo 2002-2004. Aunque la titularidad del equipamiento será municipal, la Generalitat subvencionará con un máximo de 300.000 euros la rehabilitación y adecuación de los edificios. La Generalitat colaborará también en su gestión. El delegado de las Artes Visuales, Josep Parera, defiende que estos centros tengan "unas líneas propias de actuación, pero que activen el arte contemporáneo en su territorio".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En