Petardos navideños

Probablemente estas navidades, como muchas anteriores, serán poco tranquilas para muchas personas, pues llevamos bastante años soportando petardazos a cualquier hora con el consiguiente peligro de accidentes y molestias que ello ocasiona: daños en los oídos y en los ojos, dedos amputados, niños pequeños asustados, personas que padecen de corazón y pueden sufrir un infarto por el sobresalto, animales de compañía totalmente estresados, no poder ir a las plazas principales de nuestros pueblos a tomar las uvas, etcétera.

Ya que los gobiernos locales y otros organismos no solucionan este pro...

Probablemente estas navidades, como muchas anteriores, serán poco tranquilas para muchas personas, pues llevamos bastante años soportando petardazos a cualquier hora con el consiguiente peligro de accidentes y molestias que ello ocasiona: daños en los oídos y en los ojos, dedos amputados, niños pequeños asustados, personas que padecen de corazón y pueden sufrir un infarto por el sobresalto, animales de compañía totalmente estresados, no poder ir a las plazas principales de nuestros pueblos a tomar las uvas, etcétera.

Ya que los gobiernos locales y otros organismos no solucionan este problema, y eso que saben que los almacenes de pirotecnia están repletos de estos explosivos en estas fechas, y saben dónde están y quiénes los venden. Ante esto, lo único que nos queda a los ciudadanos que no estemos dispuestos a que nos fastidien las navidades es denunciar a los establecimientos que los venden, sabiendo que es ilegal y, sobre todo, hacerles un boicoteo comercial no comprándoles nada ni nosotros ni nuestros hijos.

También, como último recurso, poner una denuncia por dejación de funciones en el juzgado o en la Guardia Civil, contra los ayuntamientos que lo permiten, siendo de su competencia. Así entenderán aquéllos que no deben seguir vendiendo cosas peligrosas y que, además, nos fastidian a todos estas entrañables fiestas.-