Prodi dice que la UE no es elástica y que su ampliación tiene límites

Derrotada en la Eurocámara la propuesta de dejar fuera a Turquía

El Parlamento Europeo respaldó ayer la decisión de los Quince para que la adhesión de los 10 nuevos miembros a la UE se materialice a partir del 1 de mayo de 2004. Pero ¿dónde está el límite de las fronteras de la Europa ampliada? El presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, afirmó ayer ante el pleno de Estrasburgo que ha llegado el momento de afrontar en público el debate sobre "quién estará dentro y quién estará fuera", porque, añadió, "no podemos pensar que es algo elástico que se pueda alargar indefinidamente".

Ni una Europa fortaleza ni una Europa goma, dijo Pr...

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El Parlamento Europeo respaldó ayer la decisión de los Quince para que la adhesión de los 10 nuevos miembros a la UE se materialice a partir del 1 de mayo de 2004. Pero ¿dónde está el límite de las fronteras de la Europa ampliada? El presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, afirmó ayer ante el pleno de Estrasburgo que ha llegado el momento de afrontar en público el debate sobre "quién estará dentro y quién estará fuera", porque, añadió, "no podemos pensar que es algo elástico que se pueda alargar indefinidamente".

Ni una Europa fortaleza ni una Europa goma, dijo Prodi. Por estos motivos, el presidente del Ejecutivo comunitario dijo ayer ante la Eurocámara que debe empezar a construirse "una estrategia global para el círculo de países que rodearán la Unión ampliada; desde Rusia al Mediterráneo". "No será tarea fácil", auguró, "pero debemos concebir y proponer nuevas formas de asociación utilizando todos los instrumentos a nuestra disposición".

Es decir, se trata de reforzar la asociación con esos países vecinos para "compartir todo menos las instituciones". El Parlamento Europeo recomendó en este sentido a los Quince que "se desarrollen nuevas fórmulas de colaboración o de asociación con los países vecinos", pero teniendo en cuenta al mismo tiempo que hay "otros países que desearán ser candidatos a la adhesión". Es el caso de los Balcanes.

Pero la pieza más polémica es Turquía. De momento ha fracasado el intento de los conservadores alemanes, austriacos, franceses y del Benelux de dejar a este país de mayoría musulmana fuera del club de la UE, otorgándole un estatuto de asociación especial. La Eurocámara optó por rechazar la iniciativa (156 votos a favor; 376 en contra y 18 abstenciones) con la oposición de socialistas, verdes, liberales y los conservadores españoles, británicos, suecos, portugueses e italianos.

Compromiso con Ankara

La Eurocámara pidió a los Gobiernos que adopten una posición "más coherente" en relación con la candidatura de Ankara con vistas a su integración futura en la UE e instaron a los Quince a que se comprometan "de buena fe" a desarrollar el proceso de adhesión. El Parlamento espera que el nuevo Gobierno turco se "esfuerce" por superar los últimos obstáculos que le impiden empezar a negociar su adhesión a la UE.

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El líder del partido islamista turco y vencedor de las últimas elecciones legislativas, Recep Tayyip Erdogan, de gira por las capitales europeas, dijo ayer, tras entrevistarse en Bruselas con Romano Prodi, que su país cumple ya los criterios políticos necesarios para dar ese paso y espera que los Quince fijen en diciembre una fecha para lanzar el proceso. "Por supuesto que hay puntos pendientes por resolver", reconoció, "pero hemos prometido dar los pasos necesarios para alcanzar la UE, y lo estamos haciendo".

Erdogan reiteró que "la UE debe ser por eso un centro de armonía entre civilizaciones y culturas, y no de ruptura". "La entrada de Turquía enriquecerá a la UE con una cultura diferente", dijo, pero advirtió que si no hay una decisión favorable de los Quince en la cumbre de Copenhague "eso repercutirá inevitablemente en nuestras relaciones".

Lo que no ha gustado nada al Parlamento es que los ministros de Exteriores hayan fijado por su cuenta una fecha para que expire el mandato de la actual Comisión -el 1 de noviembre de 2004- ni que se designen comisarios de los nuevos socios por un periodo de tres meses como miembros del Colegio. Prodi también hizo notar su malestar y dijo que el acuerdo con la Eurocámara "es necesario" antes de la cumbre de Copenhague. "Hay aspectos operacionales que nos preocupan", dijo.

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