Un juez condena a Senderowicz por una mala operación estética

El cirujano deberá indemnizar con 38.888 euros a una paciente a la que dañó la nariz

El Juzgado de Primera Instancia número 53 de Madrid ha condenado al médico Gerardo Raúl Senderowicz a indemnizar con 38.888 euros (cerca de 6,5 millones de pesetas) a María del Carmen Cerreduela Pisa, de 41 años, por las lesiones que le ocasionó al practicarle tres operaciones de nariz. Senderowicz está acusado también de haber provocado la muerte de otra paciente, Débora Catalán, de 36 años, en enero pasado, tras someterla a una operación estética.

La sentencia del Juzgado de Primera Instancia número 53 afirma que los daños que sufrió María del Carmen Cerreduela 'provocan que [le] salg...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El Juzgado de Primera Instancia número 53 de Madrid ha condenado al médico Gerardo Raúl Senderowicz a indemnizar con 38.888 euros (cerca de 6,5 millones de pesetas) a María del Carmen Cerreduela Pisa, de 41 años, por las lesiones que le ocasionó al practicarle tres operaciones de nariz. Senderowicz está acusado también de haber provocado la muerte de otra paciente, Débora Catalán, de 36 años, en enero pasado, tras someterla a una operación estética.

Más información

La sentencia del Juzgado de Primera Instancia número 53 afirma que los daños que sufrió María del Carmen Cerreduela 'provocan que [le] salgan líquidos por la nariz cuando la mujer se lava los dientes'. Según relata la resolución, dictada por el magistrado Ángel José Lera Carrasco, la paciente fue operada una primera vez por Senderowicz debido a un problema de respiración y en otras dos ocasiones con fines estéticos. 'Es aquí', en referencia a las dos últimas veces, 'donde señala el autor del informe forense que hay premura y precipitación, ya que cada vez faltan más estructuras y va habiendo más complicaciones', continúa la sentencia.

Agrega el magistrado que una vez conseguida la finalidad curativa de eliminar la insuficiencia respiratoria en la nariz, el médico siguió operando a la mujer a pesar de 'lo delicado de dicha estructura', más aún cuando el facultativo 'no extremó su deber de información' hacia su cliente respecto 'a las posibilidades de obtener el resultado estético pretendido'.

En concreto, Cerreduela contactó en 1991 con Senderowicz para que le retocase la nariz, pues sufría una desviación del tabique. 'Me operó sentada en un banco de dentista. Para reponerme el cartílago nasal, me cortó parte de las orejas para hacerme un injerto. A pesar de que tuve una fuerte hemorragia, él se marcho y la tuvieron que parar la enfermera y mi marido', explicó en febrero pasado a este periódico la afectada.

Según el magistrado, 'son completamente imputables' a Senderowicz las lesiones relativas a los orificios en el suelo de las fosas nasales, la hipoestesia subjetiva en zona labial izquierda e incisivos, la retracción en zona cutánea del pabellón auricular y dos cicatrices.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

'Todas ellas representan sucesivas pérdidas de estructuras y progresivo empeoramiento del resultado estético', explica la sentencia, que apunta que el condenado 'no es responsable de la ausencia de tabique nasal', puesto que ya no existía antes de ser operada por Senderowicz. Cerreduela se había sometido en 1981 a una previa intervención estética en Barcelona porque tenía la nariz en punta.

De todas formas, el juez estima la demanda presentada por María del Carmen Cerreduela contra Senderowicz y obliga a éste a pagarle una indemnización de 38.888 euros, una cantidad que ya ha sido abonada.

La mujer pedía en un principio una indemnización de unos 120.000 euros (20 millones de pesetas), pero, según indicaron fuentes jurídicas, descarta recurrir el fallo puesto que el médico ya ha pagado la cantidad impuesta.

Subraya la sentencia que no ha quedado acreditado que las lesiones relatadas sean las causantes de la depresión que la paciente dice padecer, pues 'no se han presentado informes ni se ha practicado pericial para, con un mínimo criterio técnico, poderla establecer'.

Senderowicz se halla imputado en otro procedimiento judicial por la muerte de su paciente Deborah Catalán el pasado 25 de enero en un clínica madrileña después de practicarle una intervención contra la obesidad.

Archivado En