El PSE plantea en Euskadi el plan contra el maltrato que rechazó el PP

Los socialistas no se dan por vencidos. Tres días después de que su propuesta de ley integral contra los malos tratos, respaldada por el resto de la oposición, fuera derrotada por la mayoría abcoluta popular en el Congreso, el PSE anunció ayer en Bilbao que la presentará como proposición no de ley en el Parlamento vasco.

Los socialistas vascos pretenden que la Administración autonóma aplique la ley integral rechazada por el PP. Antes de presentar su proposición no de ley, el PSE-EE analizará cómo se pueden adecuar las medidas diseñadas a las competencias que tiene el Gobierno de Vitoria...

Los socialistas no se dan por vencidos. Tres días después de que su propuesta de ley integral contra los malos tratos, respaldada por el resto de la oposición, fuera derrotada por la mayoría abcoluta popular en el Congreso, el PSE anunció ayer en Bilbao que la presentará como proposición no de ley en el Parlamento vasco.

Los socialistas vascos pretenden que la Administración autonóma aplique la ley integral rechazada por el PP. Antes de presentar su proposición no de ley, el PSE-EE analizará cómo se pueden adecuar las medidas diseñadas a las competencias que tiene el Gobierno de Vitoria.

Así lo explicaron ayer en Bilbao las diputadas del PSOE Elvira Cortajarena y Arantza Mendizabal junto a la secretaria de Igualdad del PSE, Eider Gardezabal. El plan del PSOE incluye medidas como que las víctimas de la violencia de género puedan cobrar el paro, tengan prioridad para trasladarse a trabajar lejos de su agresor o la creación de tribunales especiales de igualdad y asuntos familiares. También prevé que la igualdad se incluya como materia en la enseñanza.

Cortajarena explicó que la 'virtud' del plan socialista es que aborda la violencia de género como 'parte de los derechos humanos'. Recordó que entre 7.000 y 8.000 vascas la sufren.

Gardezabal preguntará a Emakunde qué falló en el protocolo contra el maltrato para que el pasado agosto una mujer fuese asesinada por su compañero en Basauri, a quien había denunciado ocho veces. También exige saber por qué su directora, Txaro Arteaga, afirmó que desde 1998 los casos de malos tratos se habían estabilizado y días después revelase que en el primer semestre la Ertzaintza ha recibido 750 denuncias.