Vivendi presionó a su auditor para evitar entrar en pérdidas en 2001

El propio Messier envió correos electrónicos con instrucciones

La autoridad bursátil francesa respondió ayer con un escueto 'no hay comentarios' a una información del diario Le Monde que da cuenta de varios intercambios de correspondencia entre el equipo de Jean-Marie Messier, ex presidente de Vivendi Universal, y el gabinete de auditoría Salustro-Reydel, que revelan 'una dependencia muy fuerte' de los auditores de la firma respecto a su cliente.

La Comisión de Operaciones en Bolsa (COB) -nombre del organismo que actúa como autoridad bursátil- alegó la imposibilidad de comentar una investigación en curso aunque, como en este caso, la ...

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La autoridad bursátil francesa respondió ayer con un escueto 'no hay comentarios' a una información del diario Le Monde que da cuenta de varios intercambios de correspondencia entre el equipo de Jean-Marie Messier, ex presidente de Vivendi Universal, y el gabinete de auditoría Salustro-Reydel, que revelan 'una dependencia muy fuerte' de los auditores de la firma respecto a su cliente.

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La Comisión de Operaciones en Bolsa (COB) -nombre del organismo que actúa como autoridad bursátil- alegó la imposibilidad de comentar una investigación en curso aunque, como en este caso, la información se refiera también a intercambios de notas entre el presidente de la autoridad bursátil, Michel Prada, y el propio Messier.

Los documentos en cuestión sugieren la existencia de presiones ejercidas por Vivendi Universal a finales de 2001 y los primeros meses de 2002, acerca del tratamiento contable que debía darse al 'aparcamiento' en un banco de las acciones de Vivendi en la televisión británica BskyB, ante las exigencias planteadas por Bruselas para que esa participación fuera vendida. La Comisión Europea había fijado esa condición a cambio de autorizar la fusión de Vivendi con Seagram, la compañía propietaria de los estudios Universal.

Del tratamiento que se diera a esa operación dependía que las cuentas de Vivendi de 2001 cayeran en números rojos o continuaran registrando beneficios.

Uno de los correos electrónicos intercambiados entre la antigua dirección de Vivendi y el gabinete de auditoría condujo a la sanción de un alto ejecutivo de este último, que se había opuesto a las propuestas de Vivendi. Uno de esos correos electrónicos procedía del propio Messier. El presidente de la autoridad bursátil intervino para que el auditor sancionado fuera repuesto en sus funciones, lo cual no se conoció hasta varios meses más tarde.

Habla una auditora

La difusión de tales interioridades se añade a la carta de una auditora despedida por el gabinete Salustro, quien afirma que el informe especial sobre Vivendi Environnement fue objeto de 'presiones muy fuertes', tanto sobre ella misma como sobre la dirección jurídica del grupo. La auditora despedida asegura que algunas comprobaciones de la comunicación financiera de Vivendi para 2001 'no fueron efectuadas en absoluto'.

Una vez que Jean-Marie Messier fue obligado a dimitir, a principios de julio, la autoridad bursátil francesa hizo pública la existencia de una investigación sobre las cuentas de Vivendi Universal, que continúa su curso sin que se conozcan sus resultados. Para dicho organismo, lo normal es no hacer comentarios sobre las indagaciones en marcha. Esa investigación no ha trascendido a la justicia, ya que la fiscalía se ha abstenido de actuar de oficio contra Vivendi Universal, a la espera de que se le remita el resultado de la información practicada por la autoridad bursátil. Sin embargo, la presión para que los jueces intervengan empieza a ser fuerte.

Empleados del grupo aplauden a Messier tras conocerse su dimisión como presidente. PLANO GENERAL - ESCENAASSOCIATED PRESS

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