El Parque de las Ciencias expone una cocina solar por primera vez en España

El Gobierno andaluz estudia exportar el invento a países pobres

El Parque de las Ciencia de Granada se ha convertido en el primer museo español y el segundo del mundo en exponer la cocina solar, un invento del alemán Dieter Seifert que permite calentar alimentos sin necesidad de otra fuente energética más que el sol. Este aparato está ideado para proteger el medio ambiente pero también puede servir de ayuda a países pobres, por lo que el Gobierno andaluz se plantea exportar ellí el invento.

La consejera de Medio Ambiente, Fuensanta Coves, que también es vicepresidenta del Consorcio Parque de las Ciencias, presentó ayer en este museo andaluz la prime...

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El Parque de las Ciencia de Granada se ha convertido en el primer museo español y el segundo del mundo en exponer la cocina solar, un invento del alemán Dieter Seifert que permite calentar alimentos sin necesidad de otra fuente energética más que el sol. Este aparato está ideado para proteger el medio ambiente pero también puede servir de ayuda a países pobres, por lo que el Gobierno andaluz se plantea exportar ellí el invento.

La consejera de Medio Ambiente, Fuensanta Coves, que también es vicepresidenta del Consorcio Parque de las Ciencias, presentó ayer en este museo andaluz la primera cocina solar que se expone en España. La Fundación Terra, encargada de su comercialización y difusión, ha donado uno de estos aparatos al parque.

Según puso de manifiesto la consejera, 'en el mundo hay 2.000 millones de personas que no disponen de leña para cocinar', por lo que este invento podría ser de garn utilidad en poblaciones que se encuentran muy alejadas de cualquier recurso y sin dinero para conseguirlo.

En cualquier caso, estas cocinas, que la Fundación Terra vende por entre 80 y 147 euros (en función del tamaño), tampoco pueden ser adquiridas por los países pobres. Por eso se ha abierto la posibilidad de que cualquier persona pueda comprar cocinas solares para ser enviadas a personas necesitadas a través de asociaciones de cooperantes. Se trata de 'apadrinar' una cocina. En España el invento se comercializará como barbacoa para elaborar alimentos al aire libre.

Su inventor, que ha trabajado 18 años en el proyecto, destacó también su valor ecológico, porque puede reducir las emisiones a la atmósfera del dióxido de carbono que produce el consumo mundial de leña.

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