Reportaje:OFERTAS DE EMPLEO

Un plan para los 'hibernados' de Xfera

Más de 200 empleados afectados por la regulación de empleo recibirán formación para mejorar sus capacidades

El puesto de trabajo de más 301 empleados de Xfera está en el aire desde enero. Sujetos a un expediente de regulación de empleo y pendientes de su posible reincorporación a la empresa, 148 participan en un programa de formación para mejorar su preparación y empleabilidad al que se pueden sumar otros 67. Se trata de una alternativa original en este tipo de situación.

Xfera, que nació en vísperas de las últimas elecciones generales para convertirse en el cuarto operador de telefonía móvil, apretó el botón de pausa en octubre. Entonces el consejo de administración anunció la decisión de re...

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El puesto de trabajo de más 301 empleados de Xfera está en el aire desde enero. Sujetos a un expediente de regulación de empleo y pendientes de su posible reincorporación a la empresa, 148 participan en un programa de formación para mejorar su preparación y empleabilidad al que se pueden sumar otros 67. Se trata de una alternativa original en este tipo de situación.

El programa de formación se centra en tres aspectos fundamentales: tecnología, liderazgo y competencias
Los participantes en los cursos son, sobre todo, ingenieros de telecomunicaciones e industriales de entre 30 y 40 años

Xfera, que nació en vísperas de las últimas elecciones generales para convertirse en el cuarto operador de telefonía móvil, apretó el botón de pausa en octubre. Entonces el consejo de administración anunció la decisión de retrasar su llegada al mercado, pendiente del desarrollo de la tecnología UMTS. La plantilla superaba los 500 trabajadores. Hoy son 220, después de que la compañía, dirigida por Antonio Cantón, presentará en enero un expediente de regulación de empleo.

El futuro de los 301 afectados no está claro aún, pero salvo los 81 que han excindido su contrato, el resto podría reengancharse a la empresa si la situación se desatasca. Mientras esto ocurre, 148 han incorporado a un programa de formación que paga la operadora y en el que participa la consultora de recursos humanos UniConsult.

Entre los objetivos declarados de este programa, que puede extenderse al resto de profesionales que se acogieron a la suspensión del contrato -reciben el 23% del salario bruto anual fijo y la empresa les paga la Seguridad Social - o a la rescisión con derecho de retorno -43% del salario en concepto de indemnización-, está la mejora de la capacidad de los participantes para conseguir y mantener un empleo. Es lo que hoy se llama empleabilidad, un concepto surgido en paralelo a la idea de que las empresas ya no están dispuestas a ofrecer un trabajo para toda la vida.

La originalidad está en la situación que viven los alumnos, que no saben a ciencia cierta si se reengancharán a la compañía. Podría decirse que la idea está a medio camino entre un plan de formación y un programa de recolocación. En cualquier caso, ni la empresa ni ellos mismos pueden permitirse estar un año en el dique seco, explica el presidente de UniConsult, Fernando de Salas. El expediente tiene una vigencia máxima de un año.

La formación que están recibiendo, y siempre según la información de UniConsult, se centra en tres aspectos: tecnología, liderazgo y competencias. Ni la empresa ni los trabajadores que forman parte de la comisión de seguimiento que sigue negociando han querido valorar el plan, que responde a un compromiso de la compañía.

Durante siete semanas, y siguiendo una metodología nacida en Estados Unidos, y que funciona como un programa de coaching, estos profesionales, sobre todo ingenieros de telecomunicaciones e industriales de entre 30 y 40 años, intentarán mejorar en habilidades como el trabajo en equipo o la gestión del tiempo. Además reforzarán sus conocimientos sobre el mercado y su propia situación en él. Según el perfil que CC OO hace de la plantilla de Xfera es muy joven, con un alto porcentaje de titulados, antigüedad inferior a un año y salarios de 6,3 millones de media. Las empresas suelen ofrecer este tipo de programas a trabajadores en activo. El que reciben los empleados de la operadora en concreto lo contratan empresas del sector servicios, farmacéutico y financiero.

A pesar de ello, desde la Federación de Comunicación y Transportes de CC OO se cuestiona esta oferta formativa, que consideran 'para pasar el rato'. El sindicato, asegura la misma fuente, presentó a la empresa una alternativa en colaboración con la Universidad Politécnica.

En cualquier caso, se trata de una vía muy poco explotada en España, coincide la mayoría de los consultados. La idea de formar para el empleo a trabajadores afectados por un expediente es 'muy novedosa', asegura Concha Vico, de Orfor Consultores, una empresa especializada en orientación laboral.

Sin hablar de recolocación

'No estamos hablando todavía de recolocación', subraya de Salas, cuya empresa también realiza este tipo de programas. La idea es que los participantes tomen las riendas de su carrera, que constaten sus posibilidades en el mercado de trabajo actual. Sea para regresar a Xfera para encontrar un nuevo trabajo.

Despidos menos traumáticos

Un expediente de regulación de empleo siempre es traumático. Una forma de aliviar las tensiones que suelen crearse cuando una empresa anuncia su intención de desprenderse de un empleado es el outplacement o recolocación, por el cual la compañía contrata a un experto para que ayude a los afectados a encontrar un nuevo puesto de trabajo. De unos años a esta parte, el recurso a este tipo de procesos se ha incrementado en España entre las grandes empresas, si bien es un mercado mucho más reducido que en otros países europeos y Estados Unidos. Sólo DBM-UniConsult ha gestionado en los dos últimos años 3.648 recolocaciones en España, algunas de las cuales aún no se han cerrado. El año pasado MOA y Creade, otras dos consultoras especializadas, ayudaron a otros 2.000 despedidos. Lucent es una de las compañías que ha escogido este modelo; 95 de los casi 600 afectados por el recorte de empleo anunciado el año pasado se acogieron a un programa de este tipo y casi la mitad están ya trabajando. Las grandes compañías de tecnología, entidades financieras, farmacéuticas y consultoras son algunas de las más proclives a buscar esta salida que suele ser mucho más habitual en compañías multinacionales de origen anglosajón.

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