Juicio a una firma que instaló una antena de telefonía móvil sin licencia
Los vecinos de la pedanía alicantina de Bacarot han llevado hasta los tribunales su lucha para impedir la instalación de una nueva antena de telefonía móvil en la zona, donde ya existen dos estaciones de similares características, cuya actividad, a su juicio, está ocasionando problemas de salud a los residentes, en total 18 familias.
El juicio por la demanda -inicialmente un interdicto de paralización de obra nueva- de los afectados se celebró ayer en el el Juzgado de Primera Instancia número 6 de Alicante. La iniciativa de los vecinos es pionera en la Comunidad, ya que es la primera ve...
Los vecinos de la pedanía alicantina de Bacarot han llevado hasta los tribunales su lucha para impedir la instalación de una nueva antena de telefonía móvil en la zona, donde ya existen dos estaciones de similares características, cuya actividad, a su juicio, está ocasionando problemas de salud a los residentes, en total 18 familias.
El juicio por la demanda -inicialmente un interdicto de paralización de obra nueva- de los afectados se celebró ayer en el el Juzgado de Primera Instancia número 6 de Alicante. La iniciativa de los vecinos es pionera en la Comunidad, ya que es la primera vez que la denuncia se dirige únicamente contra la empresa promotora del proyecto, en este caso la firma Esferas Móviles, SA. Los demandantes solicitan al juez que declare nula la instalación, todavía inactiva, y decrete la demolición de la obra, según ellos ilegal por carecer de licencia municipal, extremo corroborado por un informe del Ayuntamiento. El letrado de la empresa defendió la legalidad de la obra y también descartó, en base a informes de expertos, que la puesta en marcha de la estación entrañe riesgo para la salud. Esta parte admitió que la obra se realizó sin permiso, 'pero es la práctica habitual', matizó.
Los afectados presentaron el interdicto de paralización de obra contra la antena de telefonía el pasado mes de noviembre. 'En la zona ya hay dos antenas más, ubicadas a escasos metros de las viviendas', dijo Araceli López, portavoz de los demandantes. 'Ahora, pretenden colocarnos otra, ésta levantada a cuatro metros de una casa', añadió. López resaltó que en los últimos meses los vecinos han comenzado a sufrir problemas de salud.