Un yacimiento de Fuengirola muestra factorías de salazón y termas romanas

Encontrados en Jaén nuevos restos de la Edad del Cobre

Una factoría de salazón, hornos para la fabricación de cerámica, un vertedero de piezas de barro y unas termas componen el yacimiento romano, del siglo I al V después de Cristo, que se acaba de abrir al público en Fuengirola. El Ayuntamiento y el Ministerio de Trabajo han invertido 1,6 millones de euros en la restauración. Por otra parte, en Jaén, en Marroquíes Bajos, han aparecido nuevos restos de la Edad del Cobre.

Un agricultor que trabajaba en la Finca El Secretario, entre la circunvalación del municipio malagueño de Fuengirola y el tren de cercanías, descubrió en los años 70 con su...

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Una factoría de salazón, hornos para la fabricación de cerámica, un vertedero de piezas de barro y unas termas componen el yacimiento romano, del siglo I al V después de Cristo, que se acaba de abrir al público en Fuengirola. El Ayuntamiento y el Ministerio de Trabajo han invertido 1,6 millones de euros en la restauración. Por otra parte, en Jaén, en Marroquíes Bajos, han aparecido nuevos restos de la Edad del Cobre.

Un agricultor que trabajaba en la Finca El Secretario, entre la circunvalación del municipio malagueño de Fuengirola y el tren de cercanías, descubrió en los años 70 con su arado una escultura de mármol. Los arqueólogos llamaron a esa figura la Venus de Fuengirola. Este hallazgo y el de una escalinata romana, sacada a la luz por las obras de la variante en 1987, fueron los primeros indicios de que bajo aquellas tierras se escondían más de 15 siglos de historia. Tras cuatro años de excavaciones se ha abierto al público el yacimiento.

Se han sacado a la luz ocho piletas que servían de depósitos para el salado de pescado. También se han encontrado cinco hornos para fabricar recipientes en los que trasladar, manipular o envasar los productos del mar. Salvo uno pequeño, el resto son de la misma tipología, con planta circular y un pilar central. Se conserva el corredor de acceso y la cámara de combustión, pero han desaparecido la parrilla y la cámara de cocción del alfar.

Pero lo que se encuentra en mejor estado es un edificio termal de 540 metros cuadrados, descubierto en 1991. En lo que fuera el vestíbulo se conserva el mosaico polícromo con motivos geométricos. También se pueden visitar pequeñas piscinas, de agua fría o tibia, una de ellas circular; baños de vapor o sudor, y salas calientes. 'Hemos rescatado más de 2.500 piezas de este yacimiento que en la actualidad están en un taller de restauración municipal donde un grupo arqueólogos y conservadores las están limpiando, catalogando y restaurando', afirma la alcaldesa de Fuengirola, Esperanza Oña. 'Creemos que al otro lado de la autovía está la villa romana. Hemos declarado esas tierras zona protegida y estamos negociando con los propietarios la cesión, para ampliar el yacimiento', asegura Oña.

Mientras tanto, en Jaén, en el yacimiento de Marroquíes Bajos, se han encontrado nuevos restos de la Edad del Cobre. La intervención llevada a cabo por un equipo de arqueólogos de la Universidad de Jaén, codirigido por Alberto Sánchez, Juan Pedro Bellón y Carmen Rueda, ha permitido descubrir un gran foso de cuatro metros de profundidad y restos de una fortificación en piedra y huesos humanos, todos ellos de finales del tercer milenio antes de Cristo.

Marroquíes es un poblado arqueológico con una superficie de más de 100 hectáreas que ido emergiendo conforme crecía la capital jiennense hacia el norte. Algunos investigadores definen a este espacio como 'la Venecia de hace 4.500 años' por la abundancia de canales y sistemas hidráulicos prehistóricos que han quedado al descubierto.

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