La Policía Local de Sevilla impide que se celebre el mercadillo de la Alameda

Un impresionante dispositivo de la Policía Local, con alrededor de 100 agentes y decenas de coches patrulla, impidió ayer la celebración del mercadillo dominical de la Alameda de Hércules, en Sevilla. Los vendedores habituales del rastro sevillano denunciaron que no habían sido avisados previamente de la prohibición de trabajar allí ayer y que no se les ofrecen alternativas para ubicarse. Fuentes de la Gerencia de Urbanismo, responsable de la venta ambulante, explicaron que el mercadillo fue declarado ilegal en noviembre con el voto favorable de todos los grupos políticos del Ayuntamiento.
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Un impresionante dispositivo de la Policía Local, con alrededor de 100 agentes y decenas de coches patrulla, impidió ayer la celebración del mercadillo dominical de la Alameda de Hércules, en Sevilla. Los vendedores habituales del rastro sevillano denunciaron que no habían sido avisados previamente de la prohibición de trabajar allí ayer y que no se les ofrecen alternativas para ubicarse. Fuentes de la Gerencia de Urbanismo, responsable de la venta ambulante, explicaron que el mercadillo fue declarado ilegal en noviembre con el voto favorable de todos los grupos políticos del Ayuntamiento.

Federico Muñoz, presidente de la Asociación de Vendedores de la Alameda y el Jueves reclamó ayer al delegado municipal de Urbanismo, el andalucista Rafael Carmona, una regulación del mercadillo de la Alameda similar a la que esta misma entidad ha consensuado con el Ayuntamiento para la instalación del rastro de los jueves en la calle Feria. 'Hemos propuesto hasta siete ubicaciones alternativas, y ninguna les parece oportuna', explicó Muñoz.

Aunque los vendedores ambulantes apenas ofrecieron ayer resistencia al dispositivo policial que les impidió instalar sus tradicionales puestos, Muñoz informó ayer de que piensan acudir en la mañana de hoy a pedir explicaciones y soluciones a Urbanismo. 'Y si no las encontramos, vamos a ir cortando el tráfico hasta el Ayuntamiento a ver si nos recibe el alcalde', amenazó Muñoz.

Mientras algunos vendedores ambulantes aireaban sus protestas, alguno incluso subido a uno de los árboles de la Alameda desde el que pretendía vender un cuadro y una colección de cintas de video, los vecinos de la zona expresaban discretamente a los periodistas su satisfacción por la medida adoptada por la Policía Local.

Fuentes de la Gerencia de Urbanismo explicaron ayer que el mercadillo había sido declarado ilegal en noviembre por una comisión de venta ambulante y con el voto favorable de todos los grupos políticos.