300 inmigrantes intentan un motín en la atestada terminal de Fuerteventura

'Están peor que los animales', dice un consejero

Los cuatro agentes que custodian a los más de 300 inmigrantes retenidos en la antigua terminal de Fuerteventura contuvieron el pasado martes un intento de motín, durante el que se fugaron cinco marroquíes, cuando se abrieron las puertas para facilitarles la comida.

Los cinco fugados fueron detenidos en las horas siguientes en las instalaciones del aeropuerto, pero su acción generó una oleada de protesta, fundamentalmente entre los 150 retenidos de nacionalidad marroquí. 'La situación actual es muy tensa y, hasta cierto modo, comprensible', reconoce el director de la Administración del E...

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Los cuatro agentes que custodian a los más de 300 inmigrantes retenidos en la antigua terminal de Fuerteventura contuvieron el pasado martes un intento de motín, durante el que se fugaron cinco marroquíes, cuando se abrieron las puertas para facilitarles la comida.

Los cinco fugados fueron detenidos en las horas siguientes en las instalaciones del aeropuerto, pero su acción generó una oleada de protesta, fundamentalmente entre los 150 retenidos de nacionalidad marroquí. 'La situación actual es muy tensa y, hasta cierto modo, comprensible', reconoce el director de la Administración del Estado en la isla, Ramón Paniagua.

Según manifestó, los inmigrantes marroquíes 'saben que en los próximos días serán repatriados y entregados a las autoridades de su país', desde donde salieron a bordo de pateras después de abonar entre 420 y 720 euros, 'el ahorro de media vida laboral'.

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Para hoy está prevista la repatriación de cuarenta marroquíes, que se une al grupo de treinta devuelto esta semana y a un tercer grupo de cuarenta previsto para el lunes. 'Han hipotecado todo lo que tenían en una operación que ha resultado fallida, y de ahí su estado actual de nerviosismo', añadió Paniagua.

El consejero de Asuntos Sociales y Empleo del Gobierno de Canarias, Marcial Morales, señaló, al conocer el suceso, que 'cada día que pasan en estas condiciones de higiene, convivencia y servicios esenciales', sin ser derivados a centros de retención, 'el Estado vulnera sus derechos fundamentales'. Morales relató cómo se quedó 'horrorizado' tras una visita a la antigua terminal 'cuando sólo había en su interior un centenar de personas', por lo que avanzó que no podía imaginarse la situación actual. 'Eso no se le hace a nadie, ni siquiera a los animales', sentenció. Hasta ayer, había 300 retenidos, informaron fuentes policiales.

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Morales remitió ayer una segunda carta al delegado del Gobierno para la Extranjería e Inmigración, Enrique Fernández-Miranda, para que su departamento decida la ubicación de los centros de retención en las islas de Lanzarote, Fuerteventura, Gran Canaria y Tenerife y, de esa manera, descongestionar la actual situación del antiguo edificio del aeropuerto.

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