Díaz Alperi congela la presión fiscal pero sube las tasas un 25%

El Ayuntamiento de Alicante sólo ha ejecutado el 19% del presupuesto

Los impuestos municipales de Alicante (IBI, IAE y Vehículos) se mantendrán invariables en 2002, pero las tasas experimentarán un incremento global del 25% con la incorporación de un nuevo tributo, el de basuras. Pese a ello, tanto el alcalde, Luis Díaz Alperi, del PP, como la concejal de Hacienda, María Teresa Revenga, siguen hablando de 'congelación de impuestos en términos reales'. Esta última presentó ayer el presupuesto municipal para 2002, que supera los 31.500 millones de pesetas.

A partir del próximo año llegará un nuevo recibo municipal a los ciudadanos de Alicante: la tasa de b...

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Los impuestos municipales de Alicante (IBI, IAE y Vehículos) se mantendrán invariables en 2002, pero las tasas experimentarán un incremento global del 25% con la incorporación de un nuevo tributo, el de basuras. Pese a ello, tanto el alcalde, Luis Díaz Alperi, del PP, como la concejal de Hacienda, María Teresa Revenga, siguen hablando de 'congelación de impuestos en términos reales'. Esta última presentó ayer el presupuesto municipal para 2002, que supera los 31.500 millones de pesetas.

A partir del próximo año llegará un nuevo recibo municipal a los ciudadanos de Alicante: la tasa de basuras, un tributo hasta ahora subsumido en el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI). El proyecto económico del Ayuntamiento para 2002, presentado ayer, prevé recaudar 3.146 millones de pesetas en tasas municipales, un 25% más que este año, en el que se presupuestaron 2.505 millones. Pese a este incremento, los responsables municipales sostienen que 'en términos reales la presión fiscal permanece congelada'.

El gobierno local, en manos del PP, ha encargado un estudio comparativo para cotejar las tasas públicas en 50 ciudades españolas, porque considera que el precio de éstas es notablemente inferior en Alicante que en la gran mayoría de capitales de provincia. Según la concejal de Hacienda, María Teresa Revenga, no ocurre lo mismo con los impuestos directos (IBI, IAE y Vehículos) que, a su juicio, se encuentran parejos con otras ciudades similares o, incluso, por encima. El Ayuntamiento tiene previsto ingresar en 2002 por estos tribunos 13.689 millones de pesetas.

El proyecto económico del PP para 2002 asciende a 31.539 millones de pesetas, una cifra ligeramente superior a la del presupuesto del presente ejercicio (831 millones más). El gasto corriente crece un 5,7% y la inversión, que se sitúa en 4.364 millones, se financirá mediante la venta de suelo municipal y un nuevo préstamo por 3.200 millones de pesetas. Esta nueva carga financiera hará crecer en torno a un punto el endeudamiento municipal, que se situará en el 85%, un porcentaje que, según la edil, 'sitúa al Ayuntamiento en una inmejorable situación financiera, puesto que hasta alcanzar el índice del 110 por cien, todavía habría suficiente margen de maniobra para solicitar nuevas operaciones de crédito'.

La ejecución de los presupuestos del presente año, que se cerrarán el 30 de noviembre, ha sido muy pobre. La edil de Hacienda informó de que se ha adjudicado un 50 por ciento de los presupuestado y sólo se ha ejecutado entre un 19 y un 20 por ciento de lo consignado.

El departamento de Urbanismo se lleva la mejor tajada en el reparto de inversiones por áreas municipales. Las principales partidas se han consignado para el tramo de la Vía Parque comprendido entre la avenida de Dénia y el barrio de Juan XXIII, con 449 millones de pesetas y la urbanización de Vistahermosa-Oeste, con 307 millones. Por contra, el proyecto económico popular apenas incide en dar solución a uno de los principales problemas que atraviesa la ciudad: la inseguridad ciudadana. El presupuesto sólo prevé partidas para diez nuevos agentes de Policía Local y 5 de bomberos.

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Las transferencias de la Generalitat, tanto para inversiones como para gasto ordinario, ascienden a 1.370 millones de pesetas, con un aumento de 466 millones sobre el año 2001.

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