Rato rebaja por segunda vez el crecimiento de este año y lo fija en el 3%

La subida para 2002 se cifra en el 2,9%

El Gobierno ha tenido que revisar su pronóstico anual de crecimiento para concluir que las expectativas eran más optimistas que la realidad. Según el nuevo cuadro macroeconómico, el PIB crecerá un 3% a final de año -1,1 puntos menos que en 2000- y un 2,9% el año que viene. La previsión para el año que viene es inferior a la media del periodo 2002-2004 previsto en el Plan de Estabilidad. Un panorama económico mundial más hostil que el de los últimos años explica, según el vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía, Rodrigo Rato, que el Ejecutivo haya rebajado la euforia de creci...

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El Gobierno ha tenido que revisar su pronóstico anual de crecimiento para concluir que las expectativas eran más optimistas que la realidad. Según el nuevo cuadro macroeconómico, el PIB crecerá un 3% a final de año -1,1 puntos menos que en 2000- y un 2,9% el año que viene. La previsión para el año que viene es inferior a la media del periodo 2002-2004 previsto en el Plan de Estabilidad. Un panorama económico mundial más hostil que el de los últimos años explica, según el vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía, Rodrigo Rato, que el Ejecutivo haya rebajado la euforia de crecimiento por segunda vez en el año.

Al igual que ya ocurrió con la rebaja del 3,6% al 3,2% realizada en abril, Rato se esforzó en resaltar que, en todo caso, en España la desaceleración está dejando menos secuelas que en Europa y en Estados Unidos. Rato recordó que la Unión Europea crecerá por debajo del 2,5% y que Estados Unidos no pasará del 1,6%. El ministro cree que este entorno de ralentización mundial influye necesariamente en los indicadores españoles, aunque menos que en los de otros países.

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La demanda interna del país ha experimentado una rebaja del 4,1% registrado en 2000 hasta el 2,8% que se prevé este año. El mismo porcentaje de crecimiento se espera para 2002. También el consumo de los hogares ha sufrido un importante retroceso, del 4% que creció el año pasado hasta el 2,5% previsto para este año. Y la inversión en bienes de equipo ha caído del 5,3% al 1%. Para Rato, estos dos factores son los que mejor explican la rebaja del crecimiento económico.

Más optimista se mostró el ministro con respecto a la creación de empleo, aunque el crecimiento también será algo menor de lo previsto. Rato cree que una economía que avanza al 3% permitirá acabar el ejercicio con 324.000 nuevos puestos de trabajo, lo que dejará la cifra de parados 'en el entorno de los dos millones'. La creación de empleo es ligeramente inferior a los 324.800 previstos en abril y más distanciada de los 479.800 de 2000. Para el año que viene se espera crear 277.000 nuevos puestos, lo que situará el número de parados por debajo de los dos millones.

Tasa de paro del 12,7% Estas cifras suponen un avance del 2,1% este año y del 1,8% en 2002. La tasa de paro se mantiene con respecto a la previsión de abril en el 12,7% de la población activa, el mismo porcentaje que se espera para 2002. La población activa crecerá un punto el año que viene.

Rato insistió en las bondades del equilibrio presupuestario y aseguró que 'la política de estabilidad es apreciada por los ciudadanos'. En cuanto a la inflación, espera que se produzca una desaceleración de los precios en el segundo semestre. No obstante, continúa con su propósito de no revisar el objetivo del 2% fijado por el Banco Central Europeo, pese a que el índice de precios al consumo va por el 4,2%.

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