La mesa para la reforma de los convenios trata hoy de fijar contenidos
El Gobierno, la patronal y los sindicatos se reúnen hoy por segunda vez para reformar la negociación colectiva, que regula las relaciones laborales entre empresarios y trabajadores. Los interlocutores sociales encaran esta negociación con enormes dificultades y discrepancias. Hasta el momento, las partes sólo han sido capaces de pactar un calendario y se espera que hoy comiencen a hablar de contenidos.
El primer escollo radica en el límite temporal del debate. El Ejecutivo quiere incluir los cambios en la ley de acompañamiento de los presupuestos de 2002 -que se presentan en septiembre...
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El Gobierno, la patronal y los sindicatos se reúnen hoy por segunda vez para reformar la negociación colectiva, que regula las relaciones laborales entre empresarios y trabajadores. Los interlocutores sociales encaran esta negociación con enormes dificultades y discrepancias. Hasta el momento, las partes sólo han sido capaces de pactar un calendario y se espera que hoy comiencen a hablar de contenidos.
El primer escollo radica en el límite temporal del debate. El Ejecutivo quiere incluir los cambios en la ley de acompañamiento de los presupuestos de 2002 -que se presentan en septiembre-, lo que supone una clara limitación. A ello se une el distanciamiento entre las centrales CC OO y UGT, con una quiebra en la unidad de acción insólita desde hace 13 años.
Aunque los dos sindicatos han elaborado una declaración conjunta con los criterios que van a defender, UGT acude a los encuentros con un marcado escepticismo. Su secretario general, Cándido Méndez, ha expresado su convencimiento de que este diálogo está abocado al fracaso porque el Gobierno va a imponer una reforma 'muy regresiva'. La patronal CEOE no ha avanzado aún cuáles son los cambios que pretende y, además, ha manifestado sus preferencias por un debate bilateral. Esta actitud denota sus reticencias hacia la presencia del Ejecutivo.
Con todas esas piedras en el camino, la reforma pretende revisar un modelo de negociación colectiva cuyos pilares se empezaron a construir en el primer consenso social de la democracia. El Gobierno persigue un cambio sustancial, mientras que los sindicatos sólo quieren corregir los desajustes, algo a lo que se comprometieron con la confederación empresarial en 1997.
Los tres ejes de debate que propone el Ejecutivo son: una mejor delimitación de las materias a discutir en cada ámbito de la negociación colectiva; ampliar las facilidades a las empresas para que puedan descolgarse de lo pactado en convenios de ámbito superior (sectoriales, regionales, estatales...); y evitar que la negociación de los convenios se alargue porque una de las partes no quiera negociar.