La Guardia Urbana abre expediente por los incidentes de la calle Trafalgar

Quejas de los comerciantes por los límites de la carga y descarga

La Guardia Urbana de Barcelona ha abierto un expediente para determinar si fue o no desproporcionada la actuación de un agente en un incidente ocurrido el pasado miércoles en la calle de Trafalgar. Lo que empezó como una sanción por un aparcamiento irregular en la zona de carga y descarga acabó con dos detenidos -el conductor del vehículo en cuestión y su hijo- y heridas leves de este último al ser golpeado por un agente que utilizó la porra que lleva para su defensa personal.

El incidente se produjo cuando un agente se disponía a poner una multa por un vehículo mal estacionado. El cond...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La Guardia Urbana de Barcelona ha abierto un expediente para determinar si fue o no desproporcionada la actuación de un agente en un incidente ocurrido el pasado miércoles en la calle de Trafalgar. Lo que empezó como una sanción por un aparcamiento irregular en la zona de carga y descarga acabó con dos detenidos -el conductor del vehículo en cuestión y su hijo- y heridas leves de este último al ser golpeado por un agente que utilizó la porra que lleva para su defensa personal.

El incidente se produjo cuando un agente se disponía a poner una multa por un vehículo mal estacionado. El conductor de éste 'se negó a facilitar la documentación' y muy alterado insultó al agente, según la versión de la Guardia Urbana, que ayer insistía en que el conductor no habría sido arrestado si hubiera entregado la documentación y no hubiera mantenido una actitud tan agresiva. Mientras ocurría este incidente, presenciado por comerciantes de la zona, apareció el hijo del conductor, quien se enfrentó al guardia y recibió un porrazo en la cabeza. Un portavoz de la Guardia Urbana manifestó ayer que el expediente abierto es para determinar si la actuación de ese agente fue 'desproporcionada o no'.

Ese mismo portavoz reconocía que el control de la carga y descarga con discos horarios y presencia de agentes desde el pasado mes de marzo ha encrespado los ánimos de los comerciantes de esa zona, en general mayoristas del sector textil. 'El principal problema es que era una área en la que había mucha indisciplina en cuanto a los estacionamientos, y la normativa nueva ha cambiado el panorama drásticamente', reconocía un intendente de la Guardia Urbana, quien matizó que el Distrito del Eixample ya había mantenido alguna conversación con los comerciantes a propósito de sus quejas.

Ayer por la mañana, los comerciantes insistían en sus quejas por la presión sancionadora. 'Es una zona donde, además de cargar y descargar mucho material de furgonetas, hay muchos clientes que vienen en coches que tienen que cargar', explicaba una comerciante de la calle de Bruc. Otra añadía: 'Hace un año no venía nadie y ahora tenemos dos tipos de agentes, los de SMASSA y la Guardia Urbana, todo el día poniendo multas'.

La federación textil de la Unión Sindical Obrera de Cataluña (USOC) se solidarizó ayer con los trabajadores de las empresas textiles de la zona de Trafalgar, 'que tienen serios problemas para realizar sus operaciones de carga y descarga de mercancías'. USOC pidió al alcalde de Barcelona, Joan Clos, que busque 'el necesario equilibrio entre la política sancionadora para regular el tráfico y la actividad industrial'. El incidente, que desencadenó una manifestación de los comerciantes, fue objeto de críticas desde las filas de la oposición municipal. El concejal del PP Antonio Ainoza aseguró que el altercado es 'expresión del profundo malestar' de los ciudadanos ante el hecho de que 'las multas son la máxima prioridad del gobierno del consistorio'. Ainoza cree que el Ayuntamiento se rige por criterios de 'productividad' y 'valora el número de multas por encima de la reducción de la inseguridad ciudadana'.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En