Una escultura de su 'paloma quiromántica'evoca a Pérez Estrada en el aniversario de su muerte
El Ayuntamiento de Málaga le dedica una calle y el cantautor Amancio Prada, un concierto
Una obra de José Seguiri sobre el dibujo de la paloma quiromántica de Pérez Estrada preside desde ayer la calle La Bolsa, en el corazón de Málaga, a dos pasos del número 6 de calle Larios, donde nació Pérez Estrada en 1934. La escultura, mitad paloma mitad mano abierta, simboliza 'la hospitalidad de Málaga, la mano tendida a la creación artística', según afirmó en el acto de inauguración el alcalde, Francisco de la Torre.
Acudieron a los actos en su memoria numerosos amigos de Pérez Estrada, como los poetas Rafael Ballesteros y Pablo García Baena, el arquitecto José Ignacio Díaz ...
Una obra de José Seguiri sobre el dibujo de la paloma quiromántica de Pérez Estrada preside desde ayer la calle La Bolsa, en el corazón de Málaga, a dos pasos del número 6 de calle Larios, donde nació Pérez Estrada en 1934. La escultura, mitad paloma mitad mano abierta, simboliza 'la hospitalidad de Málaga, la mano tendida a la creación artística', según afirmó en el acto de inauguración el alcalde, Francisco de la Torre.
Acudieron a los actos en su memoria numerosos amigos de Pérez Estrada, como los poetas Rafael Ballesteros y Pablo García Baena, el arquitecto José Ignacio Díaz Pardo y el cantautor Amancio Prada, que por la tarde ofreció en el Paraninfo de la Universidad un concierto de homenaje. Prada ha puesto música a la Canción del muchacho masai, que está incluida en su último disco Escrito está, y se confiesa 'admirador y amigo' del poeta desaparecido. 'Todos tenemos el sentimiento de que está vivo y de que su obra seguirá creciendo tras su muerte', afirmó el cantautor, que recordó el homenaje que recibió Pérez Estrada en Madrid en el Círculo de Bellas Artes, pocos días antes de su fallecimiento.
En el acto de calle La Bolsa Esteban Pérez Estrada rememoró el homenaje más apreciado por su hermano en vísperas de su muerte: el nombramiento de hijo predilecto de Málaga. 'Sabía que le quedaban pocos días y le entusiasmó. Estuvo toda la semana preparando el acto: el lunes fue a la peluquería, el martes se compró la camisa, el miércoles la corbata y el viernes me pidió que hiciera lo que pudiera para que él llegara de forma digna al acto. Tuvimos que ir al hospital para que le hicieran una transfusión para tenerse en pie'. Pérez Estrada recorrió muchas veces durante su juventud la calle que une el Paseo de Sancha y el Paseo Marítimo que desde ayer lleva su nombre.
El poeta dejó a la ciudad una parte importante de su legado: su biblioteca de 8.000 volúmenes; objetos; grabaciones de audio y vídeo; álbumes ilustrados por él; fotografías; dibujos y documentos, entre ellos unas memorias personales que está prohibido divulgar antes de 30 años y parte de su correspondencia que no se conocerá antes de 15. Se ha realizado ya el inventario de este material que se instalará en el Archivo Municipal de Málaga.
El Ayuntamiento todavía no ha terminado de diseñar el espacio en el que se mostrará el legado. Esteban Pérez Estrada piensa que 'quizá el año que viene con motivo del segundo aniversario de su muerte podremos inaugurar su biblioteca'. Hay una novela inédita, El doctor Harpo, que saldrá en breve.