El fiscal de Palermo dice que la Mafia es un poder 'invisible' del Estado
La Cosa Nostra se centra hoy en las finanzas
En un libro-entrevista con el periodista experto en Mafia Saverio Lodato, publicado en coincidencia con el noveno aniversario de la muerte de Giovanni Falcone en un atentado perpetrado por hombres de la Mafia, Grasso asume el discurso del primer y más famoso arrepentido de Cosa Nostra, Tommaso Buscetta, para reconocer que la organización está a punto de ganar el pulso a la sociedad.
Han pasado los años de las guerras entre familias que ensangrentaron Sicilia. La Mafia no crea hoy prácticamente alarma social. No pone bombas ni asesina. Los objetivos de la organización criminal, se...
En un libro-entrevista con el periodista experto en Mafia Saverio Lodato, publicado en coincidencia con el noveno aniversario de la muerte de Giovanni Falcone en un atentado perpetrado por hombres de la Mafia, Grasso asume el discurso del primer y más famoso arrepentido de Cosa Nostra, Tommaso Buscetta, para reconocer que la organización está a punto de ganar el pulso a la sociedad.
Han pasado los años de las guerras entre familias que ensangrentaron Sicilia. La Mafia no crea hoy prácticamente alarma social. No pone bombas ni asesina. Los objetivos de la organización criminal, según Grasso, son otros. 'Hoy día, mucho más que en el pasado, la supervivencia de Cosa Nostra depende de las orientaciones de la Administraciones públicas, de la política, de las instituciones', señala el fiscal. Grasso ha seguido perplejo y disgustado el desarrollo de la campaña electoral, donde el silencio sobre la poderosa organización ha sido la tónica general. 'No hemos oído a los líderes de los distintos partidos afrontar el drama real de zonas enteras del Sur, todavía bajo el control de la criminalidad organizada', dice. Y apunta algunas de las graves deficiencias de la lucha antimafia: 'No se puede mirar a la Mafia sin investigar en las zonas de sombra del poder. En la Italia de 2001 todos sabemos que sigue habiendo colusiones, concomitancias, complicidades. Y ningún político puede esconderse detrás de la coartada de que el fenómeno es poco conocido'.
Respecto al que será primer ministro del nuevo Gobierno, Silvio Berlusconi, Grasso reconoce que 'pese al trabajo de investigación que se ha hecho , pese al examen de decenas y decenas de libros contables, pese a la asesoría de competentes expertos de la Banca de Italia, de ese dinero nos ha llegado sólo el olor. No se han encontrado pruebas que sostengan la hipótesis inicial; por eso se ha archivado la investigación'. Los flecos inconexos que han quedado de la investigación judicial han sido trasladados al proceso abierto contra Marcello Dell'Utri -es-trecho colaborador de Berlusconi y recién elegido senador del nuevo Parlamento-, donde existe la posibilidad de que Berlusconi comparezca como testigo de la defensa.
Grasso avala en sus declaraciones otra hipótesis que defienden muchos dietrólogos italianos: 'Cosa Nostra, pese a haber defendido siempre sus intereses, ha sido al mismo tiempo encargada de la defensa de los intereses de otros. En muchas ocasiones, al menos, la mano de la Mafia la han armado entidades externas. La convivencia de Cosa Nostra y el sistema de poder, y por lo tanto de la política, es mucho más que una simple hipótesis investigativa. Por eso, considerar a Cosa Nostra como el anti-Estado se ha demostrado como un error de bulto. Cosa Nostra, con frecuencia, ha sido el Estado'. Y este análisis es especialmente evidente, dice el fiscal, en los atentados de la Mafia de los años 1992-1993.
Detenido un 'capo' calabrés
El jefe de la mafia calabresa, Giuseppe Gaetano Santaiti, uno de los 30 criminales más buscados por la policía italiana, fue detenido el pasado sábado, según se informó ayer. El jefe de la ndrangheta podría ser condenado a 24 años de cárcel.