Paciencia en el Bidasoa
Miguel Ibarrola, vecino de Santesteban (Navarra), pescó el pasado lunes en Endarlatza el primer salmón del Bidasoa de 2001. Era un macho de 82 centímetros que pesó 5.650 gramos y difundió su nombre entre quienes se asoman a las orillas del Bidasoa en busca de más ejemplares. Los pescadores, que el pasado año sólo consiguieron capturar 35 salmones, aprovechan estos días de Semana Santa para ensayar la suerte en el río. Tiran y recogen la cuchilla giratoria y esperan con paciencia a que un ejemplar se decida a picar su anzuelo antes que ningún otro....
Miguel Ibarrola, vecino de Santesteban (Navarra), pescó el pasado lunes en Endarlatza el primer salmón del Bidasoa de 2001. Era un macho de 82 centímetros que pesó 5.650 gramos y difundió su nombre entre quienes se asoman a las orillas del Bidasoa en busca de más ejemplares. Los pescadores, que el pasado año sólo consiguieron capturar 35 salmones, aprovechan estos días de Semana Santa para ensayar la suerte en el río. Tiran y recogen la cuchilla giratoria y esperan con paciencia a que un ejemplar se decida a picar su anzuelo antes que ningún otro.