La OCU concluye que el volumen de sonido en los cines es excesivo
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) denunció ayer que el volumen del sonido de las películas que se proyectan en las salas de cine rebasa en determinados momentos los 105 decibelios, cuando el límite máximo aconsejable está en 90 decibelios. Esta denuncia se basa en un estudio realizado por la propia OCU en una docena de cines de Madrid, donde se proyectaban varias películas infantiles y de acción (Ábaco, Acteón, Box Alcalá Norte, Aragón, Canciller, Capitol, Cinesa, Estación de Chamartín-La Dehesa, Ideal Yelmo Cineplex, Imax Madrid, Kinépolis, Cinesa Luchana y UGC Cine Cité).
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La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) denunció ayer que el volumen del sonido de las películas que se proyectan en las salas de cine rebasa en determinados momentos los 105 decibelios, cuando el límite máximo aconsejable está en 90 decibelios. Esta denuncia se basa en un estudio realizado por la propia OCU en una docena de cines de Madrid, donde se proyectaban varias películas infantiles y de acción (Ábaco, Acteón, Box Alcalá Norte, Aragón, Canciller, Capitol, Cinesa, Estación de Chamartín-La Dehesa, Ideal Yelmo Cineplex, Imax Madrid, Kinépolis, Cinesa Luchana y UGC Cine Cité).
Del estudio realizado, la OCU concluye que las películas de acción son ligeramente más ruidosas que las infantiles, y precisa que el número de decibelios está relacionado con el local. Por ejemplo, en la proyección de Gladiator, la OCU registró el nivel medio más bajo (69,2 decibelios) en La Dehesa de la Estación de Chamartín, y el más alto (103,6 decibelios) en el Acteón. La OCU aconseja un nivel medio de 75 decibelios, con picos máximos no superiores a los 90, y pide a la Administración que limite 'de una vez por todas' los decibelios en el interior de los locales de ocio. La organización recuerda además a los consumidores que la contaminación acústica es una amenaza para la salud.