El Ayuntamiento de Málaga contempla dejar desierto el concurso para la limpieza

El equipo de gobierno guarda un celoso mutismo sobre la resolución del concurso, que según ha reconocido el propio alcalde ha planteado una situación 'muy delicada'. Distintos concejales consultados sobre la cuestión han evitado hacer cualquier tipo de comentario y simplemente apuntan que 'en unos días se resolverá'.

El retraso en el procedimiento es un clara muestra de los problemas surgidos. El equipo de Gobierno convocó el concurso en un pleno extraordinario urgente celebrado el pasado 18 de abril, Martes Santo, y tuvo que soportar fuertes críticas de la oposición que le acusó de pre...

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El equipo de gobierno guarda un celoso mutismo sobre la resolución del concurso, que según ha reconocido el propio alcalde ha planteado una situación 'muy delicada'. Distintos concejales consultados sobre la cuestión han evitado hacer cualquier tipo de comentario y simplemente apuntan que 'en unos días se resolverá'.

El retraso en el procedimiento es un clara muestra de los problemas surgidos. El equipo de Gobierno convocó el concurso en un pleno extraordinario urgente celebrado el pasado 18 de abril, Martes Santo, y tuvo que soportar fuertes críticas de la oposición que le acusó de precipitación y de no dejarle tiempo para estudiar el pliego de condiciones.

El PP alegó entonces que no había tiempo que perder, pues sólo el proceso de adjudicación tardaría unos cuatro meses, y la nueva empresa que se constituyera requeriría de unos siete al menos para adaptarse y cumplir las exigencias del pliego. El servicio concedido a Limasa, sociedad de la que Fomento de Construcciones y Contratas es socio mayoritario con un 51% de las acciones, frente al 49% que dispone el consistorio, expira el próximo 19 de febrero, con lo que la nueva concesionaria sólo dispondrá de unos pocos días si el Ayuntamiento finalmente decide adjudicar la concesión en las próximas dos semanas.

El alcalde ya ha admitido por ello que el Ayuntamiento tendrá que otorgar una prolongación del servicio a Limasa por razones del servicio, incluso en el caso de que el concurso se resuelva en favor de Fomento o de Urbaser. Limasa, que tuvo una primera concesión de 10 años, ya consiguió en 1997 una prórroga de 4 años, y no puede tener otra.

El Ayuntamiento planteó hacer una concesión por 16 años prorrogables en ocho más, contemplando así el máximo tiempo que la ley permite para una adjudicación administrativa de este tipo. En el pliego de condiciones se estimaba el canon anual del servicio de limpieza en 7.000 millones de pesetas a precio del año 2000, a los que hay que sumar la cantidad por la recogida de residuos y la explotación de la planta de Los Ruices.

La oposición ha calculado que en total serían 10.000 millones de pesetas anuales, por lo que cifra el negocio total en un mínimo de 240.000 millones de pesetas, más lo que corresponda en las revisiones anuales durante los 24 años.

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Acuerdo entre dos

El alcalde, que se ha reunido con los presidentes de las dos empresas que pujan con el concurso, llegó a proponerles un acuerdo para el reparto de la concesión, que al menos una de ellas no aceptó. Además, una solución así podría plantear problemas jurídicos.

Pero a las dificultades propias de una concesión de estas características, se sumaron, una vez abierto el concurso, las irregularidades detectadas detectadas en Limasa por una certificación de obra que cobró al Ayuntamiento en diciembre de 2000 por la instalación de unas conducciones de agua no potable para el baldeo del paseo marítimo de Pedregalejo que no había ejecutado.

El caso fue denunciado por IU a los tribunales. La causa sigue en fase de instrucción en la que el juez ha imputado ya a siete personas por presuntos delitos de estafa, apropiación indebida y falsedad de documento. Entre los imputados hay tres componentes de la Mesa de Contratación: La ex concejal de Medio Ambiente y actualmente de Cultura, Ana Rico; el ex jefe del área, Jorge López, y el jefe del servicio municipal de limpieza, Julián Laguna. También está imputado el gerente de Limasa, Javier Fuentes.

El equipo de gobierno no descarta, ante tal enredo, declarar desierto el concurso, propuesta que ha hecho IU, que sugiere que el servicio vuelva a municipalizarse.

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