Pujol y una nutrida embajada de consejeros viajan hoy a Baleares

La Generalitat dispensa hoy un trato institucional de deferencia hacia el pacto multipartido de izquierdas y nacionalista del Gobierno de las Islas Baleares. Pujol desplaza a Mallorca una amplísima delegación integrada por 10 consejeros que se reunirá por espacio de menos de cuatro horas con el plenario del Ejecutivo balear, que preside el socialista mallorquín Francesc Antich.

Los presidentes Pujol y Antich firmarán el acuerdo que crea el Instituto Ramon Llull, una ambiciosa plataforma multiterritorial de operaciones -que abarca desde Internet hasta las sedes internacionales- que persi...

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La Generalitat dispensa hoy un trato institucional de deferencia hacia el pacto multipartido de izquierdas y nacionalista del Gobierno de las Islas Baleares. Pujol desplaza a Mallorca una amplísima delegación integrada por 10 consejeros que se reunirá por espacio de menos de cuatro horas con el plenario del Ejecutivo balear, que preside el socialista mallorquín Francesc Antich.

Los presidentes Pujol y Antich firmarán el acuerdo que crea el Instituto Ramon Llull, una ambiciosa plataforma multiterritorial de operaciones -que abarca desde Internet hasta las sedes internacionales- que persigue la promoción exterior de la cultura y la lengua catalanas. Esta inédita entidad interautonómica deberá ser refrendada por los respectivos parlamentos, y posiblemente el Congreso de los Diputados, toda vez que se quiere que se sumen los gobiernos de Aragón, la Comunidad Valenciana y el Instituto Cervantes. Damià Pons, consejero de Cultura de Baleares, anticipó anoche que los estatutos prevén una cuota de participación del Estado a través del Cervantes.

La magnitud de la expedición catalana a Mallorca es insólita desde el comienzo de las periódicas citas que Jordi Pujol celebra desde hace una década. El líder nacionalista, con anterioridad, trató con tres presidentes que el PP tuvo en las islas. En la última de la época conservadora, en 1999, la Generalitat viajó a Menorca con seis consejeros para encontrarse con el último presidente del Gobierno balear que tuvo el PP, Jaume Matas, hoy ministro de Medio Ambiente.

La cuantiosa participación y representación en esta cumbre evidencia la buena sintonía existente entre ambas comunidades y también el tono alto de las relaciones políticas y culturales que el Gobierno de Cataluña pretende impulsar en sus vínculos con la alianza arco iris PSOE-PSM-IU-Els Verds, respaldada por Unió Mallorquina (UM).

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Las previsiones que han efectuado los diferentes departamentos de Cataluña y Baleares indican que se concertarán posiciones parecidas en la nueva financiación autonómica y la negociación para la gestión de los aeropuertos. Los acuerdos sobre política mediterránea y de la UE están ya en la vía de la tradición, al igual que la cesión de infraestructuras internacionales catalanas para promociones comerciales o culturales insulares. También hay políticas comunes en normalización del catalán, formación policial o lucha contra la drogadicción.

En el aspecto partidista, Convergència mantiene un estable matrimonio electoral y estratégico con el PSM, pero Unió desdeña los tratos con este grupo ex izquierdista y privilegia sus vínculos con la moderada UM.

Por su parte, Francesc Antich, que además de presidente de Baleares es el nuevo líder del PSOE balear, comparte las estrategias políticas de su amigo Pasqual Maragall, del PSC.

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