Un 71% de los trabajadores con convenio tendrá revisión salarial
La fuerte desviación de la inflación registrada el año pasado ha convertido la revisión salarial en uno de los caballos de batalla de la negociación colectiva. De los 8,18 millones de trabajadores cuya labor está regulada por convenio, el 70,93% posee una cláusula de garantía salarial. Esa cláusula permite recuperar una parte o el total del desfase que se produce entre el incremento de los precios y los salarios estipulados. Los sindicatos no tienen una cifra concreta del impacto que supondrá en las nóminas de las empresas, las estimaciones lo sitúan entre 200.000 y 250.000 millones de pesetas...
La fuerte desviación de la inflación registrada el año pasado ha convertido la revisión salarial en uno de los caballos de batalla de la negociación colectiva. De los 8,18 millones de trabajadores cuya labor está regulada por convenio, el 70,93% posee una cláusula de garantía salarial. Esa cláusula permite recuperar una parte o el total del desfase que se produce entre el incremento de los precios y los salarios estipulados. Los sindicatos no tienen una cifra concreta del impacto que supondrá en las nóminas de las empresas, las estimaciones lo sitúan entre 200.000 y 250.000 millones de pesetas.
No obstante, pocos son los trabajadores con cláusula que no perciben los efectos de la inflación. Sólo el 30,93% recupera la subida total del IPC desde el momento en que comenzó a desviarse. Un 10,28% la recupera parcialmente y otro 29,72% sólo a partir de 2001. Así, al 29,07% de los trabajadores sin cláusula hay que sumar un 40% que no recupera todo lo perdido por la desviación de la inflación.
Estos datos, correspondientes a la negociación colectiva del año 2000 hasta el 15 de diciembre, marcan un incremento medio del 2,89% en los salarios, muy por detrás del 4% que registró el IPC a finales de año. Los sindicatos consideran que cuando dispongan de los datos de todo el año, este incremento se podría acercar más al 3%. 'Nuestra previsión era aumentar un 3% y lo hemos alcanzado', señalaba ayer un portavoz de UGT.
De los que tienen recogida la cláusula de revisión, la recuperación salarial comienza a actuar a partir del 2,19% de media. Es decir, recuperan casi todo lo que ha subido la inflación y sólo pierden desde el 2% previsto por el Gobierno al 2,19% medio a partir del cual se aplica la subida. UGT considera esta media un gran logro. Según la central, en 2000 se intentaron evitar las llamadas cláusulas maquillaje, que recogen una revisión salarial sólo a partir de una fuerte desviación del IPC, con lo que no son aplicables si el desfase es pequeño.
Los sindicatos celebran la extensión de la cláusula de revisión al 70,93% de los trabajadores. 'Hemos mejorado la cláusula, aunque tenemos que seguir trabajando para extenderla al 100% de los trabajadores', aseguran en UGT. Comisiones Obreras cree que es pronto para valorar si la negociación colectiva de 2000 ha sido mejor que la de otros años en cuanto a los incrementos conseguidos. 'Ahora hay que ver qué impacto tienen las subidas', indica Rodolfo Benito, secretario de Comunicación de CC OO.
Aunque los datos no están cerrados -en algunas empresas aún se está ultimando la negociación-, sí es cierto que los convenios nuevos firmados durante el año 2000 incluyen mejores condiciones que los que ya existían y únicamente fueron revisados. Los 2,98 millones de trabajadores que se rigen bajo uno de estos 1.462 convenios de nueva creación fijan una subida salarial media del 3,06%. También son más los que se benefician de la cláusula de garantía: un 72,13%, frente al 70,24% de los convenios de revisión. En el caso del nivel de IPC a partir del cual se aplica la cláusula de garantía, los nuevos salen perdiendo, ya que recuperan desde el 2,34%, mientras que los de revisión lo hacen desde el 2,09%.
Recuperar el dinero perdido
Los nuevos convenios también benefician más a los trabajadores en la recuperación del poder adquisitivo. El 45,8% de los empleados con convenio nuevo recupera todo lo perdido con carácter retroactivo, es decir, desde que las previsiones del Gobierno con respecto a la inflación comenzaron a fallar. Fuera de estos mecanismos que permiten amortiguar los errores del Ejecutivo al fijar su previsión de inflación se sitúan unos tres millones de personas, según UGT. De ellas, dos millones son funcionarios de las diferentes administraciones públicas, que ven sus sueldos condenados a subir un 2% el año que viene.
A pesar de las movilizaciones que desde noviembre caldearon el ambiente para que el Gobierno permitiese una subida mayor, los empleados públicos seguirán como estaban. Ni siquiera la huelga general del pasado 14 de diciembre provocó un cambio de postura en el equipo negociador. Según los sindicatos, la función pública ha sido el sector 'más difícil' en la negociación colectiva.
El otro millón de personas que verá subir sus salarios sólo un 2% corresponde a los aproximadamente 600.000 trabajadores que perciben el salario mínimo interprofesional, fijado en 72.120 pesetas para este año, y los beneficiarios del subsidio de desempleo.
Los convenios sectoriales, es decir, los que se aplican a todos los trabajadores que comparten una misma actividad económica (como la construcción) benefician más que los que se firman con las empresas y, por tanto, sólo afectan a sus empleados. El número de trabajadores afectados por los sectoriales es de 7,29 millones, frente a los 892.225 de las empresas.
Los convenios de sectores fijan un incremento medio de salarios del 2,94%, un porcentaje superior al 2,46% de los de empresa. Y un 72,61% de los sectoriales tienen cláusula de revisión, mientras que esta condición sólo se aplica al 57,24% de los empleados que se rigen por convenios de empresa.