El ministro del Interior de Georgia promete la liberación de los empresarios

La sensación de que Francisco Rodríguez y José Antonio Tremiño pueden ser liberados en breve por sus secuestradores aumentó ayer por la presencia en la región en la que se supone que están retenidos de los ministros del Interior y de Seguridad de Georgia. El primero de ellos, Kaja Taramadze, declaró nada más descender en Ajmeta de su helicóptero que está seguro de que los dos empresarios se encuentran en el cercano desfiladero de Pankisi, y que es optimista. Según Taramazde, los rehenes serán liberados sin falta y sus secuestradores responderán ante la justicia. También aseguró que está en con...

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La sensación de que Francisco Rodríguez y José Antonio Tremiño pueden ser liberados en breve por sus secuestradores aumentó ayer por la presencia en la región en la que se supone que están retenidos de los ministros del Interior y de Seguridad de Georgia. El primero de ellos, Kaja Taramadze, declaró nada más descender en Ajmeta de su helicóptero que está seguro de que los dos empresarios se encuentran en el cercano desfiladero de Pankisi, y que es optimista. Según Taramazde, los rehenes serán liberados sin falta y sus secuestradores responderán ante la justicia. También aseguró que está en contacto con los órganos de seguridad españoles. Poco antes, el jefe de la policía de la región, Tamaz Tamazhahvili, había señalado que la prudencia le aconsejaba no decir palabra sobre las conversaciones abiertas para negociar la liberación, en las que, al parecer, se utiliza como intermediarios a los jefes locales.Los dos ministros se reunieron con los efectivos de las fuerzas de seguridad desplegados ante el desfiladero, aunque no tomaron la decisión de hacerlas penetrar en él. Eso sí, Taramazde aseguró que "si es necesario, se aplicará la fuerza contra los elementos criminales", lo que podría interpretarse como una amenaza de operación de envergadura contra el feudo de los chechenos en Georgia. Aparentemente, se confía en que la solución surja de la negociación antes que del uso de la fuerza, y no mediante el pago de un rescate, sino aceptando la impunidad de los secuestradores.

Las informaciones que vinculaban a Rodríguez y Tremiño con Valeri Samjaradze, un empresario maderero secuestrado poco después que ellos, no pudieron ser confirmadas sobre el terreno. La hija de Samjaradze, que participaba en uno de los piquetes que bloqueaban los accesos a Pankisi, se negó a contestar todas las preguntas excepto una: ¿Tuvo su padre alguna relación directa o indirecta con españoles? La respuesta, un rotundo "no".

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