Repsol YPF incrementa otras cuatro pesetas el precio de todos los carburantes

Repsol YPF, la mayor petrolera española, con una cuota de mercado del 45%, incrementó anoche cuatro pesetas el precio de todos sus carburantes. El alza se produce tan sólo 13 días después de que la compañía subiese de un solo golpe, y en pleno puente del Pilar, cinco pesetas el precio del gasóleo y dos el de las gasolinas. Esta vez la subida se produce en vísperas de otra fiesta (1 de noviembre), que puede suponer un movimiento masivo de automóviles.No se recuerda en el sector petrolero español dos incrementos tan altos de los precios de los carburantes en tan poco tiempo, que, en el caso del ...

Repsol YPF, la mayor petrolera española, con una cuota de mercado del 45%, incrementó anoche cuatro pesetas el precio de todos sus carburantes. El alza se produce tan sólo 13 días después de que la compañía subiese de un solo golpe, y en pleno puente del Pilar, cinco pesetas el precio del gasóleo y dos el de las gasolinas. Esta vez la subida se produce en vísperas de otra fiesta (1 de noviembre), que puede suponer un movimiento masivo de automóviles.No se recuerda en el sector petrolero español dos incrementos tan altos de los precios de los carburantes en tan poco tiempo, que, en el caso del gasóleo, el más consumido, suma nueve pesetas, y en las gasolinas, seis. El aumento tendrá un inevitable impacto en la inflación, que ya sufre un serio deterioro por causa del petróleo. La subida de ayer, al igual que la de hace 13 días, abrirá un nuevo foco de protesta en los consumidores, especialmente de agricultores, transportistas y pescadores, que pactaron a finales de septiembre con el Gobierno medidas para paliar los efectos de la escalada de los carburantes en sus costes.

A partir de hoy, el usuario deberá pagar el litro de gasóleo a un máximo de 128,9 pesetas; el de la gasolina sin plomo, a 145,9 pesetas, y el de la súper, a 155,9 pesetas. En lo que va de año, el precio del gasóleo ha subido 20 pesetas por litro (15,5%); el de la gasolina sin plomo, 19 pesetas (13%), y el de la súper, 23 pesetas (15%). El gasóleo agrícola que se vende en estaciones de servicio (el 10% del total) subirá también cuatro pesetas por litro, hasta situarse en 86,9 pesetas.

Cepsa y BP, segunda y tercera operadoras del mercado español, no tenían previsto secundar de inmediato esta medida, aunque no descartaban hacerlo en breve plazo. Cepsa subió la semana pasada dos pesetas el precio del gasóleo de automoción y el de las gasolinas súper y sin plomo, un incremento que se añadió al llevado a cabo antes del puente del 12 de octubre. Por su parte, BP también se sumó a estas subidas generalizadas de precios.

Fuentes de Repsol YPF atribuyen esta nueva subida a la fuerte depreciación que ha sufrido el euro frente al dólar en los últimos días. Ayer, la divisa europea volvía a marcar mínimos (0,8252 dólares por euro). A ello hay que añadir que los precios en el mercado internacional, tanto del crudo como de las gasolinas, se mantienen altos y con tendencias alcistas. Las fuentes de la petrolera agregaron "que la subida de ayer en España ya ha sido reflejada en los demás países europeos esta semana, por lo que los precios de venta al público en el país siguen por debajo de la media de los Quince".

El incremento de ayer en los precios de los carburantes tendrá su repercusión en el índice de precios de consumo (IPC) correspondiente al mes de octubre, según el Instituto Nacional de Estadística (INE). En septiembre, la inflación se situó en el 3,7% en términos interanuales y fue el peor dato desde agosto de 1996. Para que se mantuviera en ese nivel, el IPC de octubre tendría que ser de cero, como el año pasado. Las dos fuertes subidas de los combustibles no permiten aventurar que eso ocurra. Más bien al revés. Cuando salió el dato de septiembre, las petroleras hacía dos meses que no subían los precios y el dato ya era malo, así que el impacto de las dos últimos incrementos muy probablemente será catastrófico.

El efecto que la escalada de los precios de los carburantes está haciendo mella en la labor de contención de la inflación en todos los países industrializados. Basta recordar que en Francia la inflación se incrementó un 0,6% en septiembre con respecto al mes anterior y un 2,2% en términos interanuales, el peor dato en cuatro años, y en Alemania, el 0,5%, dejando la interanual en su peor momento en seis años.