Dos detenidos tras el hallazgo del cadáver del dueño de un restaurante en un frigorífico

Xin Min, empresario chino de 49 años, fue hallado muerto en la madrugada de ayer, con 20 cuchilladas, dentro de la cámara frigorífica de su restaurante de Alcalá de Henares. El cadáver estaba maniatado a una silla y tenía cortes en el pecho, la espalda y los brazos. La víctima se desangró antes de congelarse. Min llevaba muerto unas cuatro horas cuando fue hallado por su esposa, alarmada porque éste no llegaba a casa. La policía detuvo ayer a dos chinos, presuntamente relacionados con el asesinato y con las mafias chinas dedicadas a la extorsión.

La policía sospecha que el asesinato es ...

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Xin Min, empresario chino de 49 años, fue hallado muerto en la madrugada de ayer, con 20 cuchilladas, dentro de la cámara frigorífica de su restaurante de Alcalá de Henares. El cadáver estaba maniatado a una silla y tenía cortes en el pecho, la espalda y los brazos. La víctima se desangró antes de congelarse. Min llevaba muerto unas cuatro horas cuando fue hallado por su esposa, alarmada porque éste no llegaba a casa. La policía detuvo ayer a dos chinos, presuntamente relacionados con el asesinato y con las mafias chinas dedicadas a la extorsión.

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Forcejeo violento

La policía sospecha que el asesinato es obra de una de las cinco organizaciones criminales orientales que operan en España. Esta banda llevaba varios meses tratando de extorsionar, sin éxito, al dueño del local. Pero éste se resistía a pagar a las triadas (organizaciones mafiosas chinas) una protección no deseada pese a que había recibido algún aviso, según explicaron los familiares de la víctima a la policía, que se enfrenta a la dificultad de investigar en un mundo de férrea estructura jerárquica donde impera la ley del silencio.Además, el empresario, que pagaba un alquiler mensual de 300.000 pesetas por el local, había comunicado a sus amigos que no podía hacer frente a las amenazas, ya que el restaurante estaba en crisis por la escasez de clientela, según el propietario de un local vecino. En la comisaría de Alcalá no constan denuncias del empresario ni tampoco hay registrados incidentes en el restaurante.

Anoche había dos personas detenidas en la comisaría de Alcalá en relación con el homicidio. Se trata de dos ciudadanos chinos, según indicaron fuentes de la investigación.

La esposa del fallecido fue quien acudió al local, situado en el número 70 de la vía Complutense, preocupada porque su marido tardaba demasiado en regresar a casa. Encontró a su marido congelado, cosido a puñaladas, con el cuerpo atado y ya rígido.

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Dos supuestos matones chinos entraron al local hacia la una de la madrugada de ayer, según fuentes policiales. Xin Min se encontraba solo, haciendo caja. Sus últimos empleados se habían marchado a las 0.30. El empresario abrió la puerta a sus asesinos. Nadie de los vecinos observó nada extrasño. Por los destrozos descubiertos en el local, la policía sospecha que hubo un violento forcejeo hasta que consiguieron reducir a la víctima y atarle de pies y manos en una silla. Luego le amordazaron para que no gritara. Entonces comenzaron a torturarle y le asestaron 20 cuchilladas. A continuación le metieron, aún vivo, atado a la silla, en la cámara frigorífica del restaurante. El traslado dejó un rastro de sangre por todo el local.

La víctima agonizó a una temperatura de 18 grados bajo cero en el interior de la cámara frigorífica. El empresario murió desangrado mientras su cuerpo sin vida se congelaba. Según los médicos del 061, los homicidas emplearon un cuchillo de gran tamaño y le infligieron tanto cortes como puñaladas profundas.

En el interior del restaurante, los agentes de policía científica buscaban ayer huellas dactilares. "Hay mucha trabajo ahí dentro", comentó uno de los especialistas. Los hermanos de Xin Min acompañaron a los agentes en sus labores de investigación y posteriormente acudieron a declarar a comisaría.

La mujer de Xin Min se hallaba ayer en casa de unos familiares de Madrid recuperándose del ataque de nervios que sufrió al descubrir el cadáver de su marido.

Xin Min, estaba casado y tenía una hija de unos 25 años. Llevaba 16 años en España y abrió hace ocho años el restaurante Xin Min (Nuevo Día de Mañana). El negocio se encuentra en una zona céntrica de Alcalá de Henares. El local tiene una limpia fachada de unos diez metros, de la que cuelgan adornos y farolillos rojos. La puerta está enmoquetada y el interior está decorado con abundancia de cuadros, flores y cortinas de colores claros.

Los vecinos mantienen que el negocio funcionaba con normalidad, aunque con pocos clientes: "Entraba poca gente entre semana; los viernes y sábados iba mejor", añadió un vecino.

La titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Alcalá de Henares ha decretado el secreto de sumario.

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