Las élites que huyen del país

Nadir Mokneche reconoció ayer que era imposible rodar su película en Argelia. Los problemas industriales y políticos de una cinematografía totalmente controlada por el Estado convertían ese rodaje en una misión imposible. "Me gustaría rodar en Argelia, pero resulta muy difícil. Además nunca he pedido financiación en Argelia", dijo el cineasta. Muy crítico con la situación que vive el país magrebí, el filme apenas se ha proyectado un par de veces en la cinemateca de Argel.

Nadir Mokneche resaltó dos puntos clave en el panorama argelino de hoy: el fracaso de la emancipación de las mujeres...

Nadir Mokneche reconoció ayer que era imposible rodar su película en Argelia. Los problemas industriales y políticos de una cinematografía totalmente controlada por el Estado convertían ese rodaje en una misión imposible. "Me gustaría rodar en Argelia, pero resulta muy difícil. Además nunca he pedido financiación en Argelia", dijo el cineasta. Muy crítico con la situación que vive el país magrebí, el filme apenas se ha proyectado un par de veces en la cinemateca de Argel.

Nadir Mokneche resaltó dos puntos clave en el panorama argelino de hoy: el fracaso de la emancipación de las mujeres y la fuga de las élites. El propio actor y director podría ser un ejemplo del segundo problema. Nacido y criado en Argelia, ha vivido y estudiado desde su juventud en Francia, Inglaterra y Estados Unidos, mientras su familia sigue residiendo en el país norteafricano. Nadir Mokneche es un argelino cosmopolita que ha lanzado una mirada dura y tierna a un tiempo sobre un grupo de mujeres que pelea por algo tan sencillo como una vida mejor.