Sufrido cliente de Iberia
Los sufridos clientes de Iberia debemos estar alerta: el personal de tierra contraataca. Hartos de recibir quejas de los usuarios del servicio, ahora se dedican a embromar a los clientes; al menos eso es lo que me sucedió a mí en el aeropuerto de Tenerife Norte el pasado 25 de julio. Tras llegar con dos horas y media de adelanto, mis dos acompañantes y yosolicitamos a un amabilísimo empleado asientos cerca de la ventanilla. "Siempre que no se dediquen a abrirla y cerrarla", comentó jocoso. Vaya, qué derroche de simpatía, así da gusto. "Si puede ser, lejos del ala". "Tranquilos, les voy a dar u...
Los sufridos clientes de Iberia debemos estar alerta: el personal de tierra contraataca. Hartos de recibir quejas de los usuarios del servicio, ahora se dedican a embromar a los clientes; al menos eso es lo que me sucedió a mí en el aeropuerto de Tenerife Norte el pasado 25 de julio. Tras llegar con dos horas y media de adelanto, mis dos acompañantes y yosolicitamos a un amabilísimo empleado asientos cerca de la ventanilla. "Siempre que no se dediquen a abrirla y cerrarla", comentó jocoso. Vaya, qué derroche de simpatía, así da gusto. "Si puede ser, lejos del ala". "Tranquilos, les voy a dar unos asientos estupendos". La sorpresa la recibimos al subir al avión: asientos en el pasillo central situados sobre las alas. No, si además de los retrasos, overbooking, pérdida de maletas y demás incidentes, ahora hay que aguantar que se rían de nosotros. Maldita la gracia.-