Montoro reprende a CiU por romper su compromiso de abtenerse en la votación del decreto de horarios

La delegación de la Generalitat de Cataluña que ayer inició la negociación con el Partido Popular de los presupuestos generales para el 2001 se llevó ayer una dura reprimenda por parte del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro. El hecho de que Convergència i Unió (CiU) rompiera su compromiso de abstenerse en la votación del decreto liberalizador de los horarios comerciales y terminara por votar en contra y además decidiera interporner un recurso ante el Constitucional, provocó los reproches del ministro. Montoro expresó al consejero de Economía catalán, Artur Mas, y al portavoz de CiU en el ...

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La delegación de la Generalitat de Cataluña que ayer inició la negociación con el Partido Popular de los presupuestos generales para el 2001 se llevó ayer una dura reprimenda por parte del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro. El hecho de que Convergència i Unió (CiU) rompiera su compromiso de abstenerse en la votación del decreto liberalizador de los horarios comerciales y terminara por votar en contra y además decidiera interporner un recurso ante el Constitucional, provocó los reproches del ministro. Montoro expresó al consejero de Economía catalán, Artur Mas, y al portavoz de CiU en el Congreso, Xavier Trias, la voluntad del Gobierno de pactar las cuentas del Estado para el próximo año pero a continuación les advirtió de que el PP no tolerará otra deslealtad semejante. "Habéis convertido un debate sobre medidas liberalizadoras en un debate sobre competencias autonómicas. Quiero saber vuestra predisposición para que a la mañana siguiente no lo echéis todo a rodar", les echó en cara el ministro según uno de los asistentes a la reunión, en una reprimenda que duró cerca de 20 minutos.Según diversas fuentes, Mas y Trias pactaron con el vicepresidente de Economía, Rodrigo Rato, la abstención de CiU a la liberalización de horarios comerciales después de que el Gobierno rebajara de forma considerable sus pretensiones iniciales. El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, y el líder de Unió, Josep Antoni Duran Lleida, decidieron posteriormente dar marcha atrás a esta decisión tras las presiones ejercidas por parte de las asociaciones de comerciantes de Cataluña.

Pero Montoro, tras presentar las crifras macroeconómicas de las cuentas del Estado para el 2001, dejó entrever a la parte catalana que el apoyo de CiU a los presupuestos generales es fundamental para crear un clima favorable de cara a la negociación del nuevo sistema de financiación autonómica.

[Ayer desde Turín, Jordi Pujol apremió al Gobierno central a iniciar cuanto antes el diálogo para acordar el modelo de financiación y añadió que CiU tiene su propuesta concreta].

El ministro de Hacienda se comprometió a mantener el mismo ritmo inversor del Estado en Cataluña que este año se sitúa en el 16,6 %. El consejero de Economía de la Generalitat solicitó diversas partidas presupuestarias para financiar el Plan Director de Infraestructuras de Barcelona, que afecta a la línea 9 del metro, y construir el túnel de Bracons, que facilitará la comunicación con Francia.

Montoro confirmó que el Ejecutivo del PP retrasará hasta el año 2002 su intención de suprimir el IAE y la negocición con CiU de las medidas liberalizadoras sobre la ley del suelo y la Inspección Técnica de Vehículos.

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