El módulo de vivienda 'Zvezdá' se une hoy a la estación espacial

El complejo orbital se ensambla a 390 kilómetros de altura

Tras 15 días en el espacio, desde su lanzamiento el 12 de julio, está previsto que hoy el módulo Zvezdá de vivienda y control de la Estación Espacial Internacional (ISS) quede enganchado al complejo orbital formado por dos módulos unidos. El atraque, planeado para primeras horas de la madrugada, se realiza a 390 kilómetros de altura automáticamente. En el Zvezdá vivirá la primera tripulación permanente de la ISS.

Los módulos ruso Zariá y estadounidense Unity, que forman la embrionaria ISS, llevan en órbita más de 600 días a la espera de la llegada del también ruso ...

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Tras 15 días en el espacio, desde su lanzamiento el 12 de julio, está previsto que hoy el módulo Zvezdá de vivienda y control de la Estación Espacial Internacional (ISS) quede enganchado al complejo orbital formado por dos módulos unidos. El atraque, planeado para primeras horas de la madrugada, se realiza a 390 kilómetros de altura automáticamente. En el Zvezdá vivirá la primera tripulación permanente de la ISS.

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Los módulos ruso Zariá y estadounidense Unity, que forman la embrionaria ISS, llevan en órbita más de 600 días a la espera de la llegada del también ruso Zvezdá, que proporciona ahora al complejo medios de control y navegación, además de espacio habitable para largas permanencias de astronautas. El retraso en la fabricación y puesta en órbita del Zvezdá, de 20 toneladas, ha paralizado la construcción en órbita de la estación, que cuando esté acabada, dentro de pocos años, sumará una masa de 460 toneladas con módulos y equipos de 16 países. Los socios de este proyecto internacional son Estados Unidos, Rusia, Europa y Japón.Durante las horas previas al atraque, el Zvezdá y la ISS han volado en formación, a una distancia de unos 25 kilómetros, hasta las 2.44, hora peninsular española, de hoy, momento previsto para que ambas estructuras tomaran contacto.

En la maniobra de atraque del nuevo módulo a la estructura que forman el Zariá y el Unity, el Zvezdá juega un papel pasivo, y es la ISS existente la que se aproxima -por el extremo del módulo ruso- al recién llegado, encendiendo sus motores. La operación de enganche se hace bajo vigilancia del centro de control de tierra con el sistema automático ruso de atraque denominado Kurs.

"El Zvezdá está ahí básicamente esperando que algo entre en contacto con él", comentó ayer Mark Ferring, controlador de vuelo de la NASA. Desde su lanzamiento, el módulo ruso ha realizado varias maniobras de colocación en órbita correcta y los controladores de la ISS han realizado las pruebas pertinentes de los equipos de a bordo y han activado los sitemas de navegación.

Dado que la maniobra de atraque automático se consideraba difícil, estaban previstos dos intentos de enganche, y en caso de fallo en ambos, una tripulación de astronautas rusos serían lanzados al espacio el próximo 10 de agosto para intentar realizar manualmente una operación de emergencia. Pero los responsables rusos tenían ayer mucha confianza en la maniobra puesto que han realizado más de un centenar de atraques automáticos en la vieja estación Mir.

Tras la unión de los tres módulos, el Zvezdá debe asumir la responsabilidad del control de la ISS desactivándose los sistemas del Zariá que hasta ahora han cumplido esa misión.

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