Plan pionero de la Guardia Civil contra los robos en la Costa Dorada

La Guardia Civil de Tarragona pondrá en marcha una operación pionera en España para prevenir los robos y el gamberrismo, en los hoteles de la Costa Dorada, donde el pasado mes éstos se incrementaron respecto a años anteriores. Desde el 15 de junio se han cometido en esta zona 106 delitos, desde asaltos a cajas fuertes hasta hurtos en zonas comunitarias, como piscinas y restaurantes, la mayoría de ellos propiciados por bandas organizadas en las habitaciones de los establecimientos hoteleros.El subdelegado del Gobierno en Tarragona, Raúl Navarro, se negó ayer, por razones de seguridad, a facili...

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La Guardia Civil de Tarragona pondrá en marcha una operación pionera en España para prevenir los robos y el gamberrismo, en los hoteles de la Costa Dorada, donde el pasado mes éstos se incrementaron respecto a años anteriores. Desde el 15 de junio se han cometido en esta zona 106 delitos, desde asaltos a cajas fuertes hasta hurtos en zonas comunitarias, como piscinas y restaurantes, la mayoría de ellos propiciados por bandas organizadas en las habitaciones de los establecimientos hoteleros.El subdelegado del Gobierno en Tarragona, Raúl Navarro, se negó ayer, por razones de seguridad, a facilitar el número de agentes que participarán en esta operación, aunque aseguró que la cifra cubre todos los hoteles de la Costa Dorada, pero no los de Tarragona, Reus y Tortosa, de cuya seguridad se hace responsable el Cuerpo Nacional de Policía. El plan se aplicará especialmente en las poblaciones de Cambrils y Salou, donde se ha centrado la actuación de los ladrones.

Los agentes de la Guardia Civil que tienen destinada esta misión van de paisano y disponen de un teléfono móvil al que los directores de hoteles y personal cualificado pueden recurrir cuando "vean movimientos anómalos o sospechosos, tanto en el interior como en las inmediaciones de sus establecimientos". El plan se aplica desde el pasado sábado y hasta el 31 de agosto, una época en que la ocupación hotelera de la zona se sitúa en el 96%. Si fuese necesario, el despliegue se podría prorrogar.

El subdelegado del Gobierno en Tarragona explicó que, pese a que en algunos de los casos se habían producido enfrentamientos entre los clientes y los atracadores, en ningún caso se había llegado más allá de la intimidación, y que no habían habido agresiones.

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