Los empleados de La Naval amenazan con acciones de fuerza ante la falta de trabajo
Los trabajadores del astillero público de La Naval de Sestao amenazaron ayer con recurrir a acciones de fuerza para conseguir que la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), dependiente del Ministerio de Economía, ofrezca una solución de futuro para la factoría vizcaína. Alrededor de 1.200 empleados, la práctica totalidad de la plantilla, se manifestaron en la mañana de ayer desde el astillero hasta el Ayuntamiento de Sestao para quejarse de la falta de encargos de construcción y de perspectivas a largo plazo para la empresa.El presidente del comité de empresa, Miguel Ángel As...
Los trabajadores del astillero público de La Naval de Sestao amenazaron ayer con recurrir a acciones de fuerza para conseguir que la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), dependiente del Ministerio de Economía, ofrezca una solución de futuro para la factoría vizcaína. Alrededor de 1.200 empleados, la práctica totalidad de la plantilla, se manifestaron en la mañana de ayer desde el astillero hasta el Ayuntamiento de Sestao para quejarse de la falta de encargos de construcción y de perspectivas a largo plazo para la empresa.El presidente del comité de empresa, Miguel Ángel Asporosa, señaló que ante el actual estado de cosas los empleados han "optado por la reivindicación por medio de la manifestación, la concienciación social y, si hace falta, aunque no queremos llegar a eso, a utilizar, la fuerza bruta". La carga de trabajo de la factoría de Sestao, según explicaron representantes de los sindicatos, es prácticamente nula. De hecho, está a punto de concluirse un buque petrolero y hasta el mes de noviembre no está previsto que se inicie la construcción de una draga para una empresa armadora belga.
Promesas incumplidas
El encargo de los buques gaseros para surtir a las plantas gasísticas y energéticas proyectadas en el Puerto de Bilbao todavía no se ha concretado, así como tampoco los supuestos planes de la SEPI para "integrar o fusionar" La Naval con el astillero Bazán. La situación de la factoría, subrayó Miguel Ángel Asporosa, "es actualmente precaria y, evidentemente, mucho peor que hace un año y medio, fecha en que nos prometieron que íbamos a tener carga de trabajo suficiente".
La falta de encargos puede llevar a que desde julio y hasta noviembre, la práctica totalidad de la plantilla tenga que entrar en regulación de empleo, con su repercusión correspondiente en la industria auxiliar que trabaja con el astillero. Asporosa advirtió a la SEPI de que los trabajadores no van a aceptar un expediente de regulación. "Vamos a echar un pulso, vamos a ver la fuerza que tenemos para solventar el problema", señaló el presidente del comité de empresa. Los sindicatos se consideran "engañados" por los directivos de la SEPI.
Poco antes de comenzar la manifestación, representantes sindicales pusieron fin al encierro que comenzaron la noche anterior en las oficinas del astillero.