La consejera de Educación anuncia un plan para la integración escolar de niños inmigrantes

La consejera de Educación, Cándida Martínez, aseguró ayer en Almería que su principal reto para los próximos cuatro años será incrementar la calidad de la enseñanza en Andalucía, así como conseguir que los estudiantes aprendan a convivir y a ser solidarios. Martínez, que visitó una de las aulas temporales de adaptación lingüística para niños inmigrantes que funcionan en la provincia, anunció que su consejería extenderá esta experiencia a toda la comunidad a través de un plan global que formará parte del desarrollo de la Ley de Solidaridad.

Almería fue la primera provincia andaluza en la...

La consejera de Educación, Cándida Martínez, aseguró ayer en Almería que su principal reto para los próximos cuatro años será incrementar la calidad de la enseñanza en Andalucía, así como conseguir que los estudiantes aprendan a convivir y a ser solidarios. Martínez, que visitó una de las aulas temporales de adaptación lingüística para niños inmigrantes que funcionan en la provincia, anunció que su consejería extenderá esta experiencia a toda la comunidad a través de un plan global que formará parte del desarrollo de la Ley de Solidaridad.

Almería fue la primera provincia andaluza en la que comenzaron a funcionar las aulas temporales de adaptación lingüística para alumnos inmigrantes que llegaban al colegio sin ningún conocimiento del español. Aunque después se iniciaron programas similares en Huelva y Málaga, será la experiencia almeriense la que sirva de base para la puesta en marcha del plan con el que Educación pretende extender la presencia de este tipo de aulas en los centros donde sean necesarias. "La inmigración es una nueva realidad a la que queremos atender con sumo interés y estas aulas están demostrando una experiencia muy positiva que sirve de ejemplo", explicó Martínez.En este curso que está a punto de finalizar se han matriculado en los colegios almerienses más de 2.200 alumnos inmigrantes, en una provincia donde funcionan tres aulas de adaptación lingüística. La consejera no ha precisado por el momento cuantas nuevas unidades se integrarían en el plan que pretende implantar en toda la comunidad.

En cuanto a la Ley de Solidaridad, la titular de Educación aseguró: "Nos corresponde a nosotros desarrollarla y es por tanto uno de nuestros objetivos fundamentales. Ningún niño, por ninguna razón, debe tener dificultades para lograr una educación óptima".

Estos planteamientos sintonizan con lo que Cándida Martínez pretende que sea una de las principales líneas de trabajo de su consejería. "Hay que combinar los conocimientos generales con la nueva situación del mundo. Los jóvenes deben comprender que valores como la solidaridad son necesarios para esta sociedad. Por eso plantearemos nuestro modelo de educación sobre tres ejes principales: aprender los conocimientos necesarios para obtener una formación orientada al trabajo, aprender a aprender y aprender para la convivencia", dijo.

La consejera considera que el trabajo realizado hasta ahora ha permitido poner las bases y que ha llegado el momento de apostar por la calidad del sistema educativo andaluz. "Es nuestra principal apuesta y para ello el mejor método de trabajo es promover una participación abierta y franca de todos los sectores que forman parte del sistema", afirmó.

Reforzar las actuaciones en la etapa de educación infantil; insistir en los mecanismos de evaluación y autoevaluación; crear programas específicos para luchar contra el fracaso escolar y conseguir que la Formación Profesional alcance el prestigio que le corresponde, son algunas de las medidas concretas en las que Martínez pretende insistir durante esta legislatura.

Otro de los objetivos es el incremento de las actividades extraescolares en los centros. "Estamos estudiando de qué modo se financiarían esas actividades y ya hay un debate abierto sobre la posibilidad de crear una empresa que se dedique a la organización de ese tipo de actividades", aseguró.

La situación del profesorado interino también preocupa a la responsable andaluza de Educación, quien cree que debe tenerse en cuenta que los interinos son personas que ya han dedicado parte de su vida y de sus conocimientos a la enseñanza. En ese sentido, Cándida Martínez recordó que "hay un acuerdo con los sindicatos para que los interinos que lleven al menos un año tengan asegurada su plaza durante tres años".