Homenaje a Marc Grau
Se pasaba el día pegado a su guitarra y afirmaba que no tenía vacaciones. Era un músico con mayúsculas, de esos músicos que viven a través de notas musicales, de sueños sonoros, de canciones que flotan en el aire y que a veces se encarnan entre las cuerdas de una guitarra. A todo ello dedicó su vida, una vida traducida en giras con grupos como Rocky Muntanyola, Sisa, El Último de la Fila y Els Pets, artistas a los que prestó su guitarra durante años. Además, vivió en los estudios de grabación buscando el sonido idóneo para Lax'N'Busto, Sopa de Cabra, La Madam, Whyskin's, Umpah-Pah y muchos más...
Se pasaba el día pegado a su guitarra y afirmaba que no tenía vacaciones. Era un músico con mayúsculas, de esos músicos que viven a través de notas musicales, de sueños sonoros, de canciones que flotan en el aire y que a veces se encarnan entre las cuerdas de una guitarra. A todo ello dedicó su vida, una vida traducida en giras con grupos como Rocky Muntanyola, Sisa, El Último de la Fila y Els Pets, artistas a los que prestó su guitarra durante años. Además, vivió en los estudios de grabación buscando el sonido idóneo para Lax'N'Busto, Sopa de Cabra, La Madam, Whyskin's, Umpah-Pah y muchos más.No en vano, Marc Grau fue considerado el productor del pop-rock en catalán, el músico que tradujo en sonidos las entonces bisoñas intenciones de unos artistas que estaban en el comienzo de sus carreras musicales.
Vivió así; es más, en sus últimos días ocupó su tiempo en producir Sol, el último disco de Els Pets, quienes asistieron entre asombrados y emocionados a sus últimos esfuerzos. Hace pocos días se cumplió el primer aniversario de la muerte de Marc, y todos aquellos que en alguna ocasión le acompañaron han querido recordarle en una fiesta concierto que quiere ser algo más íntimo que un simple homenaje.
Por ello, desde Manolo García a Max Sunyer, pasando por Quimi Portet, Adrià Puntí, Lax, Bars, Quintana i Batiste, Sopa de Cabra, Whyskin's, Pedro Javier González y La Madam, se reúnen esta noche en Bikini (22.00, 1.000 pesetas la entrada) para tocarle música. Desde algún sitio la oirá Marc Grau, era su vida.-