Conejero aporta recibos de cosméticos y del 'súper' para justificar 52 millones de subvenciones

Desde recibos de cosméticos comprados en farmacia hasta recibos del supermercado, pasando por taxis, comidas, cafés y, por supuesto, viajes, muchos viajes. El profesor Manuel Ángel Conejero ha aportado finalmente documentación para justificar los más de 52 millones de pesetas que ya ha recibido de la Diputación, el Ayuntamiento y la Generalitat en concepto de subvenciones para la organización del congreso internacional dedicado al dramaturgo británico William Shakespeare que se ha de celebrar en Valencia en el año 2001 y que al final sumarán unos 80 millones.

En noviembre del año 1996, ...

Desde recibos de cosméticos comprados en farmacia hasta recibos del supermercado, pasando por taxis, comidas, cafés y, por supuesto, viajes, muchos viajes. El profesor Manuel Ángel Conejero ha aportado finalmente documentación para justificar los más de 52 millones de pesetas que ya ha recibido de la Diputación, el Ayuntamiento y la Generalitat en concepto de subvenciones para la organización del congreso internacional dedicado al dramaturgo británico William Shakespeare que se ha de celebrar en Valencia en el año 2001 y que al final sumarán unos 80 millones.

En noviembre del año 1996, el exdirector del Palau de la Música de Valencia y exdirector de Teatres de la Generalitat, Manuel Ángel Conejero, presidente de la Fundación Shakespeare por él fundada, presentó un proyecto para la celebración en Valencia, en el año 2001, de un congreso internacional sobre el dramaturgo. La International Shakespeare Association, con sede en Stratford-Upon-Avon, la localidad inglesa en la que nació el genial autor, que desde el año 1971 viene organizando un congreso cada cinco años, había decidido meses antes que Valencia albergara la séptima edición del evento, cuyas anteriores citas tuvieron lugar en Vancouver, Washington, Stratford, Berlín, Tokio y Los Ángeles. El polémico profesor acudió a la Diputación, al Ayuntamiento y a la Generalitat para buscar subvenciones. Y las consiguió después de firmar los correspondientes convenios.Desde entonces, las tres administraciones citadas han concedido generosas subvenciones al proyecto de Conejero: en conjunto, y para las tres primeras anualidades -1997, 1998 y 1999-, más de 50 millones de pesetas, a los que habrá que sumar las aportaciones correspondientes a los dos ejercicios que quedan, con lo que en total se alcanzarán los 80 millones.

Cada año, Conejero ha renovado los convenios, para seguir recibiendo dinero. Para ello presenta una memoria de actividades. Pero hasta ahora nunca había justificado en qué se gasta el dinero, a pesar de la insistencia de la oposición socialista, que desde el principio se mostró contraria a la concesión de subvenciones a Conejero y mostró sus dudas acerca de la capacidad del profesor para administrar el dinero. Finalmente, sin embargo, el PP, que gobierna en las tres instituciones con mayoría absoluta, se vio forzado, a finales del pasado año, a tomar en cuenta la petición de la oposición. El diputado responsable de Cultura en la Diputación de Valencia, Antonio Lis, fue el primero en pedirle las cuentas a Conejero.

Para justificar el destino del dinero que ha recibido desde 1997, Conejero ha aportado centenares de facturas, recibos, resguardos, comprobantes y justificantes de todo tipo celosamente guardados a lo largo de estos años. Las partidas más cuantiosas son las correspondientes a los viajes que Conejero y los miembros de su equipo han realizado por todo el mundo para preparar el congreso: desde Londres hasta Los Ángeles, pasando por Cuba. Los gastos de personal, en forma de "becas" para sus "colaboradores", constituyen otro importante apartado de los gastos realizados por Conejero para preparar el congreso sobre el autor de Hamlet. Los montajes de espectáculos, las campañas de extensión teatral y la publicidad de estos actos se llevan otro buen pellizco.

'Chopped pork'

Pero junto a los justificantes correspondientes a esos gastos, el presidente de la Fundación Shakespeare ha remitido a la Administración fotocopias de todo tipo de recibos de escasa cuantía, muchos de ellos de apenas unos centenares de pesetas. Así, aparecen recibos de comidas, cafés, taxis, gasolina, compras en farmacia y en supermercados: desde 8,45 libras esterlinas por dos tés y un summer pudding en el afamado Fortnum&Mason londinense, hasta 10.875 pesetas destinadas a la adquisición de una batería para el teléfono móvil, pasando por las 2.720 pesetas gastadas en un supermercado madrileño por la compra, entre otros productos, de varios tarros de mousse de queso fresco, dos packs de pilas y 150 gramos de chopped pork. Pero la palma se la lleva una factura de una farmacia, también de Madrid, por la compra, entre otros productos, de una caja de Germinal Acción Inmediata, un cosmético en ampollas "vitalizador instantáneo de la piel".