El Cesid espió a Jesús Gil meses antes de las municipales y elaboró un informe de sus negocios

El Cesid espió hace un año a Jesús Gil y elaboró un informe sobre sus actividades y presuntos negocios ilícitos al frente de la alcaldía de Marbella. El informe, basado en noticias de prensa, asegura que el líder del GIL evade dinero a México y Suiza y señala que su actividad se centra, "cada vez con más descaro, en busca del lucro personal valiéndose del cargo público". Gil ha negado todas las imputaciones del Cesid, mientras su hija Myriam se querellará contra El Mundo -que ayer publicó el informe- por acusarla de haber colaborado en el "saqueo" de Marbella.

El informe del Cesid, serv...

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El Cesid espió hace un año a Jesús Gil y elaboró un informe sobre sus actividades y presuntos negocios ilícitos al frente de la alcaldía de Marbella. El informe, basado en noticias de prensa, asegura que el líder del GIL evade dinero a México y Suiza y señala que su actividad se centra, "cada vez con más descaro, en busca del lucro personal valiéndose del cargo público". Gil ha negado todas las imputaciones del Cesid, mientras su hija Myriam se querellará contra El Mundo -que ayer publicó el informe- por acusarla de haber colaborado en el "saqueo" de Marbella.

El informe del Cesid, servicio secreto dependiente del ministro de Defensa, Eduardo Serra, tiene ocho folios y recomienda una inspección minuciosa de las cuentas del Ayuntamiento de Marbella y de sus empresas municipales, así como "potenciar las investigaciones que sobre los máximos responsables municipales pueda llevar a cabo la Fiscalía Anticorrupción".El documento alerta sobre la proximidad de las elecciones municipales del 13-J y de "la gran probabilidad" de que el GIL crezca en votos. "Esto posibilitará a los máximos dirigentes de este partido, fundamentalmente a su presidente J. G, el seguir cometiendo este tipo de irregularidades", dice. Asimismo, hace sorprendentes conjeturas sobre las causas que llevaron a Gil a presentarse por Ceuta y Melilla cuando ya era público que el presidente del Atlético de Madrid no encabezaría las listas en ninguna de las dos plazas. En el caso de la primera, señala que si Gil fuese alcalde-presidente "adquiriría inmunidad parlamentaria, dificultando, aún más, cualquier actuación judicial". El canditado del GIL por Ceuta fue Antonio Sampietro.

El documento del Cesid, que dirige el general Javier Calderón, está dividido en ocho apartados y su contenido se nutrió en su práctica totalidad de recortes de prensa, según comprobó EL PAÍS a las pocas semanas de su elaboración y distribución a ministros y miembros de instituciones del Estado.

Las acusaciones más graves se refieren a la supuesta evasión de dinero de Gil al extranjero. El Cesid indica que el ex edil de Hacienda Rafael González "ha sido señalado por una fuente como una de las personas encargadas de sacar dinero de J. G. hacia México y Suiza". Éste lo niega: "En mi vida ha estado ni en Suiza ni en México. Nunca he evadido dinero del señor Gil ni de nadie", señala el hoy coordinador de la alcaldía marbellí.

El Cesid cita también a F. B. V. un supuesto testaferro de Miguel Ángel Gil Marín, hijo del alcalde, como "una de las personas encargadas de sacar dinero de España hacia Suiza, a través de Italia". En ninguno de los dos casos se facilitan los números de cuentas o el nombre de los bancos donde se habría depositado el dinero. Gil niega haber evadido dinero. "Que me den los datos de los bancos para reclamar el dinero", señaló a éste diario en noviembre cuando fue consultado sobre esos depósitos.

Gil rechazó también tener relación con Ramón Mesas Pérez, dueño de los restaurantes La Pesquera, al que el informe dedica un apartado. Según el Cesid, sociedades interpuestas de Mesas hacen operaciones de blanqueo de dinero de las que se benefician J. G y sus inmediatos colaboradores". Mesas lo niega: "Es una auténtica calumnia, nunca he tenido ninguna relación con Gil ni con sus colaboradores. Soy el único propietario de mi empresa". La respuesta de Gil es similar: "La relación que tuve con este señor es que aceptó, cuando nadie quería, instalarse en determinados sitios de la ciudad, bajo los concursos o la normativa vigente. Hoy parece que, como la mayoría, su negocio es floreciente".

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El informe del Cesid se refiere también al presunto pago de comisiones ilegales a los máximos responsables municipales y añade en el apartado seis: "Se tiene constancia de que periódicamente Myriam Gil Marín (hija del alcalde) viaja a Marbella y regresa con un maletín con dinero en efectivo que, en parte, se ingresa en la cuenta 0200302181 que la sociedad Promociones Guadalquivir, propiedad de Jesús Gil, tiene abierta en la oficina 987 de La Caixa (2100) y en la que, durante nueve meses, ha habido unos ingresos, en efectivo, superiores a 700 millones de pesetas". Según Gil, las cifras ingresadas en La Caixa "son muy superiores, ya que hemos vendido por más de 20.000 millones propiedades nuestras, como bien saben todos los que nos han investigado".

El documento repasa temas como el de la constructora Belmonsa, la urbanización Marbella Sierra Blanca; los apartamentos de Jotsa en Madrid, propiedad de las hijas de Gil y Pedro Román, su ex teniente de alcalde; la expropiación del hotel Andalucía Plaza; la publicidad estática de Marbella; las deudas del Ayuntamiento y el alquiler de vehículos municipales. En todos ellos, los agentes del Cesid sólo aportan informaciones publicadas en los medios de comunicación.

En el capítulo dedicado a las deudas municipales se dice que la forma de "falsificar las cuentas consiste, según fuentes del propio Ayuntamiento marbellí, en facturar un número de horas muy superior a las que realmente se emplean en hacer las obras". Los agentes del Cesid no sustentan con pruebas o documentos ninguna de las principales aseveraciones de su informe, que fue ampliado con otro que incide en la supuesta evasión de dinero. Ninguno de los dos ha sido remitido al juzgado ni a la Fiscalía Anticorrupción.

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