El colegio de Alhama se hundió por la oxidación de la armadura de las vigas
El pabellón del colegio Conde de Tendillas de Alhama de Granada se vino abajo inesperadamente la noche del 3 de diciembre por la oxidación de las armaduras de las vigas y las pilastras, según el informe inicial de los técnicos de la Consejería de Educación en Granada. La oxidación, a su vez, fue causada por la falta de ventilación de la cámara antihumedad. Aunque el otro pabellón se encuentra en buen estado, Educación ha decidido trasladar a todos los escolares a otro colegio de la localidad.
El edificio fue construido en 1963 y hasta ese día no había mostrado síntomas de debilidad. Sin...
El pabellón del colegio Conde de Tendillas de Alhama de Granada se vino abajo inesperadamente la noche del 3 de diciembre por la oxidación de las armaduras de las vigas y las pilastras, según el informe inicial de los técnicos de la Consejería de Educación en Granada. La oxidación, a su vez, fue causada por la falta de ventilación de la cámara antihumedad. Aunque el otro pabellón se encuentra en buen estado, Educación ha decidido trasladar a todos los escolares a otro colegio de la localidad.
El edificio fue construido en 1963 y hasta ese día no había mostrado síntomas de debilidad. Sin embargo, a la una de la noche del 3 de diciembre el forjado antihumedad de la planta baja se hundió por el fallo de las vigas y las pilastras de ladrillo del vano central. Las armaduras metálicas se habían oxidado debido a la escasa ventilación de la cámara antihumedad. No obstante, los técnicos añaden una segunda hipótesis sobre el accidente: el agotamiento de las pilastras o una alteración de la cimentación. Hasta que no se realicen los desescombros y se estudie con detalle la zona del desplome no se podrá determinar con previsión la causa derrumbamiento.
Tras el hundimiento del forjado antihumedad cedieron las seis pilastras de ladrillo que sustentaban el forjado de la primera plante y la cubierta. Tras este primer episodio, un día después, sobrevino el desplome de la fachada principal y de las divisiones interiores y de las cubiertas. Según los técnicos, dadas las características del derrumbe inicial era imposible haber apuntulado la fachada para impedir el segundo.
Los técnicos no han encontrado ningún indicio de deterioro en el otro pabellón del colegio. Sin embargo, Educación ha decidido trasladar a los 173 escolares que asistían al Conde de Tendillas a otro centro de enseñanza de Alhama, para evitar dudas y nerviosismo entre sus familias. Esta solución tendrá carácter provisional hasta final del prime trimestre. Con posterioridad, la Consejería de Educación ha acordado con el Ayuntamiento de Alhama convertir en escuela un edificio destinado en principio a biblioteca municipal.
El colegio, hasta el día en que se derrumbó, sólo había registrado el hundimiento de un falso techo, un accidente sin relación con el posterior.