EL BOLETO PREMIADO, EN LA PAPELERA

La camarera de un bar de Puerto del Rosario (Fuerteventura) rescató ayer de la basura y restituyó a su dueño un boleto de la Bonoloto premiado la noche del lunes con 100.111.327 pesetas, después de que su propietario lo tirara. El agraciado, un trabajador de la construcción natural de un pueblo de Pontevedra, de 50 años, que no quiso facilitar su identidad salvo que responde al nombre de Manuel, reconoció que tiró el boleto a la basura cuando se fue a tomar un bocadillo en un bar de la ciudad. Según afirmó, destinará el dinero a asegurar el futuro de su único hijo, de 18 años, a constru...

La camarera de un bar de Puerto del Rosario (Fuerteventura) rescató ayer de la basura y restituyó a su dueño un boleto de la Bonoloto premiado la noche del lunes con 100.111.327 pesetas, después de que su propietario lo tirara. El agraciado, un trabajador de la construcción natural de un pueblo de Pontevedra, de 50 años, que no quiso facilitar su identidad salvo que responde al nombre de Manuel, reconoció que tiró el boleto a la basura cuando se fue a tomar un bocadillo en un bar de la ciudad. Según afirmó, destinará el dinero a asegurar el futuro de su único hijo, de 18 años, a construirse una nueva vivienda en Puerto del Rosario y a reparar "tantos palos" recibidos por obras que no le han pagado. El ganador, que había apostado 400 pesetas, llegó hace 13 años a Fuerteventura, donde comenzó a trabajar como oficial de obra, y en la actualidad tiene cuatro obreros a su cargo. "No me escondo de nadie, pero no quiero fotos, ni cámaras de televisión", manifestó el agraciado.- ,