Una explosión de gas butano causa un muerto en la Barceloneta
Una explosión en los bajos del número 27 de la calle de Pescadors, en el barrio de la Barceloneta, causó la muerte ayer a Miguel Rodríguez Rodríguez, de 75 años de edad, y heridas de diversa consideración a otras seis personas, todos vecinos del inmueble. La explosión, que se produjo a las nueve de la mañana, se desencadenó por la acumulación de gas butano en los bajos del bloque de pisos, donde se encontraron restos de una bombona con el tubo flexible seccionado. Los restos hallados serán remitidos al juzgado para que determine si se pudo tratar de un intento de suicidio, puntualizaron fuente...
Una explosión en los bajos del número 27 de la calle de Pescadors, en el barrio de la Barceloneta, causó la muerte ayer a Miguel Rodríguez Rodríguez, de 75 años de edad, y heridas de diversa consideración a otras seis personas, todos vecinos del inmueble. La explosión, que se produjo a las nueve de la mañana, se desencadenó por la acumulación de gas butano en los bajos del bloque de pisos, donde se encontraron restos de una bombona con el tubo flexible seccionado. Los restos hallados serán remitidos al juzgado para que determine si se pudo tratar de un intento de suicidio, puntualizaron fuentes del Ayuntamiento de Barcelona.La onda expansiva destruyó completamente los bajos y el primer piso del inmueble en la fachada que da a la calle de Comte de Santa Clara y dio un considerable susto a los residentes en los bloques adyacentes. La explosión se oyó con nitidez también desde uno de los paseos centrales del barrio de la Barceloneta, el del Almirall Cervera, desde donde se podía observar el gran boquete que causó la explosión.
Aparentemente, los pisos superiores del inmueble no parecían haber sufrido daño alguno. Sin embargo, la onda expansiva generó una situación de grave riesgo de hundimiento, según precisó el jefe de los bomberos, Miguel Ángel Fuentes, por lo que fue apuntalada toda la fachada. El alcalde de Barcelona, Joan Clos, que acudió al lugar del accidente junto con el primer teniente de alcalde, Xavier Casas, explicó que la fachada del bloque de viviendas es una de las paredes maestras, por lo que "la situación es extremadamente peligrosa para todo el edificio". El edificio que sufrió el accidente tiene unos 40 años de antigüedad y tiene planta baja más cinco pisos. Su estructura es similar a la del resto de los bloques de la Barceloneta y la planta baja -por el lado de la calle de Comte de Santa Clara- era una vivienda.
La explosión causó inicialmente siete heridos, uno de ellos de gravedad. Se trataba de Miguel Rodríguez Rodríguez, que ingresó en el hospital del Mar con un traumatismo craneoencefálico, otro torácico y otro en el abdomen. El herido, que vivía en el primer piso, justo encima de donde se originó la explosión, tenía una salud delicada y, al no superar la intervención quirúrgica a la que fue sometido urgentemente, falleció.
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