La última cumbre de Rodolfo Benito

A la cumbre entre el Gobierno regional y los sindicatos asistirá, quizá por última vez, el actual secretario general de CCOO-Madrid, Rodolfo Benito. En septiembre, el sindicalista madrileño, que lleva 12 años en el empeño de arañar mejoras sociales a los Gobiernos de Joaquín Leguina (PSOE) y de Alberto Ruiz-Gallardón (PP), probará sus fuerzas y buscará consensos para convertirse en el sustituto del actual secretario general de CCOO, Antonio Gutiérrez. En esa carrera hacia el liderazgo máximo del sindicato compite con otros tres compañeros que quieren llegar antes al primer despacho de C...

A la cumbre entre el Gobierno regional y los sindicatos asistirá, quizá por última vez, el actual secretario general de CCOO-Madrid, Rodolfo Benito. En septiembre, el sindicalista madrileño, que lleva 12 años en el empeño de arañar mejoras sociales a los Gobiernos de Joaquín Leguina (PSOE) y de Alberto Ruiz-Gallardón (PP), probará sus fuerzas y buscará consensos para convertirse en el sustituto del actual secretario general de CCOO, Antonio Gutiérrez. En esa carrera hacia el liderazgo máximo del sindicato compite con otros tres compañeros que quieren llegar antes al primer despacho de CCOO.Después de su oposición de septiembre a secretario general, Rodolfo Benito podría cambiar de sede y responsabilidad. Tanto si aprueba el examen como si lo suspende. Nadie descarta un pacto entre candidatos para consolidar un equipo que puede colocar, sin luchas internas, a Benito o a otro candidato como secretario general. Benito aporta a su campaña nacional la experiencia de haber negociado intensamente durante 12 años con gobiernos socialistas y populares. Antes de dirigir el sindicato en Madrid fue metalúrgico (trabajó en una platería) y secretario regional del metal. Ahora guarda en los archivos del sindicato alguno de los acuerdos punteros alcanzados en la Comunidad de Madrid, entre ellos una Ley de Participación Sindical que garantiza la presencia de sindicatos en todas las empresas públicas de la Comunidad, además de pactar con la patronal la solución extrajudicial de los conflictos.

Los dos últimos acuerdos tuvieron gran impacto. Por un lado consiguió, junto al ugetista José Ricardo Martínez, un compromiso del Gobierno regional para primar a las empresas privadas con más trabajadores fijos en los concursos públicos de la Comunidad. Dicho acuerdo, rechazado por la Confederación Empresarial Independiente de Madrid (Ceim), está denunciado ante la UE por la patronal de la construcción. Gobierno y sindicatos defienden juntos su trato de favor a la estabilidad en el empleo. También arrancó CCOO, junto a UGT, un pacto por la Escuela Pública que, con más de 130.000 millones de pesetas, significa una de las mayores inversiones en los centros de enseñanza de toda España.