El Partido Popular pierde la mayoría en el archipiélago
Con casi el 44% de los votos en las Islas Baleares, el PP gana las elecciones pero no logra la mayoría absoluta para revalidar la tradicional presidencia del Gobierno balear, y pierde también el protagonismo hegemónico que tenía en Menorca, Ibiza y Formentera. Para gobernar, el PP sólo tiene un socio posible, Unió Mallorquina, con 3 diputados. El PSOE obtuvo el 23,3% de los votos y pretende encabezar una alternativa multipartidista al estilo del Olivo italiano. La particular proporcionalidad corregida del sistema electoral autonómico, con listas con primas en las islas menores, favorece que l...
Con casi el 44% de los votos en las Islas Baleares, el PP gana las elecciones pero no logra la mayoría absoluta para revalidar la tradicional presidencia del Gobierno balear, y pierde también el protagonismo hegemónico que tenía en Menorca, Ibiza y Formentera. Para gobernar, el PP sólo tiene un socio posible, Unió Mallorquina, con 3 diputados. El PSOE obtuvo el 23,3% de los votos y pretende encabezar una alternativa multipartidista al estilo del Olivo italiano. La particular proporcionalidad corregida del sistema electoral autonómico, con listas con primas en las islas menores, favorece que la suma del conjunto de las minorías supere al partido ganador. En Menorca, la izquierda socialista, nacionalista y de antiguos comunistas (PSOE,PSM,EM) derrota por un consejero al PP; en Mallorca, se reproduce el mismo reparto que en 1995, por lo que UM puede auparse a hombros de la izquierda hasta la presidencia de la institución de la isla mayor, o entregar el poder balear al PP.
En Ibiza, el Pacto Progresista (socialistas, verdes, nacionalistas, Izquierda Unida y Esquerra Republicana de Catalunya) empata a votos y diputados con el PP, que le supera por una décima.
El voto de Formentera
Formentera, que elige un diputado, ha dado la victoria a la izquierda de la Coalición de Organizaciones Progresistas y el Consell de Ibiza y Formentera será gobernando por la actual senadora Pilar Costa. Tras 16 años del PP en el poder, Jaume Matas se estrenó como candidato para suceder al tradicional liderazgo del controvertido Gabriel Cañellas, y ha asegurado que quiere controlar el PP, pero no ha vencido como solía hacer la derecha desde 1983. Repitió los resultados de Cañellas en Mallorca y perdió en el resto.
En Palma de Mallorca, el PP repite la mayoría absoluta en el Ayuntamiento de la capital, y está en posición de mantener el gobierno de ciudades de peso como Inca, Ciutadella de Menorca, Manacor, Llucmajor, Sant Josep de Ibiza. El PSOE arrasa en sus feudos de Calvià, Mahón, Formentera (con sus aliados del pacto) y podrá gobernar en Sóller.
El candidato del PSOE, Francesc Antich, destacó que "el PP ha perdido todas las mayorías insulares", Maria Antònia Munar, de Unió Mallorquina, no desveló si apoyará a la izquierda o al PP, pero significó que "se podía dar un cambio importante". Jaume Matas explicó que "el PP es el partido que mejor se identifica con la sociedad" y dijo que han ganado "claramente".