El Gobierno e Iberia rechazan la última oferta de los pilotos y sugieren ir a los tribunales

La compañía Iberia rechazó ayer la oferta que los pilotos del SEPLA presentaron el pasado jueves y que ofrecía paz social durante el verano a cambio de separar la firma del convenio colectivo de la discusión sobre segregación de activos. La compañía contraatacó con la aceptación de firmar el convenio colectivo y dirimir las discrepancias en los tribunales o con un arbitraje. El ministro de Industria, Josep Piqué, respaldó la oferta de la compañía y señaló que la garantía de no hacer huelga durante el verano es "insuficiente" cuando la contraprestación es un convenio con tres años de vigencia....

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La compañía Iberia rechazó ayer la oferta que los pilotos del SEPLA presentaron el pasado jueves y que ofrecía paz social durante el verano a cambio de separar la firma del convenio colectivo de la discusión sobre segregación de activos. La compañía contraatacó con la aceptación de firmar el convenio colectivo y dirimir las discrepancias en los tribunales o con un arbitraje. El ministro de Industria, Josep Piqué, respaldó la oferta de la compañía y señaló que la garantía de no hacer huelga durante el verano es "insuficiente" cuando la contraprestación es un convenio con tres años de vigencia.

Los pilotos de Iberia recibieron ayer dos negativas a su última propuesta: la del ministro de Industria, Josep Piqué, y la de la propia compañía. Iberia rechazó anoche la propuesta que presentaron los pilotos y que ofrecía paz social para el verano y la firma del VI Convenio Colectivo. A cambio, pedían que la compañía aceptase discutir aparte los temas referentes a la segregación de activos y la equiparación de las mejoras entre todos los colectivos.Iberia se presentó ayer a la reunión con los pilotos con una contrapropuesta en la que ofrecía la firma del convenio y la contratación de nuevos pilotos. En la contrapartida propone que sean los tribunales los que diriman las discrepancias, principalmente la segregación de activos y la unificación de la flota.

Iberia señaló que la búsqueda de una "normalización" en la compañía pasa por un acuerdo total de los asuntos planteados, ya sea mediante un pacto o mediante el compromiso de aceptar las resoluciones judiciales al respecto. "Cualquier acuerdo parcial no pasa de ser una cortina de humo", señala la compañía en un comunicado.

El SEPLA criticó la negativa de la aerolínea a aceptar su propuesta en los términos en que estaba planteada. Ante este rechazo a su "oferta de paz", el SEPLA vuelve a la carga y no descarta "ninguna medida legal y sindical a su alcance" si la compañía "se niega" finalmente a firmar el convenio colectivo. No obstante, estudiará la propuesta de Iberia y reanudarán las conversaciones la próxima semana, según confirmaron fuentes de ambas partes.

Los pilotos ya habían tenido a mediodía de ayer una pista de por dónde iba a discurrir el que se está volviendo interminable camino de negociación. El portavoz del Gobierno y ministro de Industria, Josep Piqué, había afirmado que "garantizar la paz social durante el verano es insuficiente". El ministro pidió al SEPLA que haga extensiva esta garantía a medio plazo y consideró insuficiente que, en caso de firmarse el VI Convenio Colectivo, que tendrá vigencia de tres años, "sólo se garantice un verano tranquilo".

"La paz social hay que ofrecerla sobre bases sólidas, no susceptibles de ser interpretadas en sentido contrario", dijo Piqué sobre la oferta del SEPLA a la dirección de Iberia de no convocar movilizaciones para salvaguardar la campaña de este verano.

En la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, Piqué respondió con ironía a esta oferta afirmando que "nunca estaremos lo suficientemente agradecidos a los pilotos por decirnos que vamos a tener un verano tranquilo".

Los temores de Piqué

Señaló que si se acepta un convenio de tres años, "lo mínimo es que se garantice, salvo que surjan circunstancias nuevas hoy no conocidas, paz social para tres años". Piqué mostró sus reservas y destacó que el mensaje de los pilotos podría tener otra lectura. "Podrían estar anticipándonos que es muy probable que vuelva a haber conflictos después del verano", y reiteró su petición al SEPLA de que "reflexionen para alcanzar un acuerdo lo más global posible".

Recordó que en el Plan de Viabilidad de Iberia, firmado en 1994, en circunstancias "dramáticas de la compañía", se establecieron "sacrificios" a los colectivos de Iberia y se les dieron a los pilotos "derechos sobre decisiones que corresponden a los gestores de la compañía". Piqué se refería así al derecho de veto que los pilotos establecieron en dicho plan sobre cualquier decisión que afectara a la segregación de activos de la compañía o a cualquier acuerdo de fusión.

"Eso tenía sentido en aquel momento, pero ahora la empresa quiere que se vuelva a una situación normalizada, en la que los gestores toman las decisiones que les corresponden, y los pilotos, pilotan", afirmó categóricamente.

El titular de Industria señaló que, con independencia del momento que la SEPI (Sociedad Estatal de Participaciones Industriales) considere más adecuado para la salida a Bolsa en función de los mercados, la privatización de Iberia se mantiene para el próximo otoño.

El Gobierno conserva así el calendario previsto, frente a los rumores que apuntaban un retraso hasta el año 2000 de la que constituye la mayor privatización de 1999, una oferta pública de venta (OPV) de entre el 52% y el 54% de la compañía.

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